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Enfrente tendrá al Granada. El cuadro nazarí presenta malos números en Nervión, donde perdió 14 veces de 17 visitas y sólo ganó (1-2) tras estar 40 años fuera de la élite. Este domingo se juega seguir en ella.

La Liga hace una pausa en el camino hacia la gloria. Y lo hace con la despedida en Nervión de un curso con luces y sombras. Un Sevilla-Granada en Primera que históricamente ha tenido color local. En la máxima categoría de nuestro fútbol, el balance es concluyente: en 17 visitas del rival, hubo 14 victorias sevillistas (siete de ellas por goleada), dos empates a cero, y un único triunfo nazarí en 2011 (1-2), justo a la vuelta del Granada CF a la élite, tras 40 años fuera de ella.

Este domingo, datos al margen, el equipo granadino llega con la imperiosa necesidad de puntuar en el Sánchez-Pizjuán para seguir con opciones de permanecer en Primera. Pero, como suele argumentarse, la regularidad se refleja en 38 jornadas y el respeto a la competición requiere afrontarlo con todo el interés.

En este sentido, en el recuento global del torneo doméstico, los de Emery han ofrecido una evidente doble personalidad, algo así como un perfil ‘bipolar’, según el cual su peor versión le ha impedido ganar algún partido a domicilio.

Sin embargo, en casa, han mostrado una imagen muy fiable y unos números soberbios. Cabe colegir pues que los nervionenses deben sellar su adiós liguero ante su afición, sea cual sea el once elegido por Emery, peleando la 15ª victoria casera, teniendo ya el billete europeo en el bolsillo. Su trayectoria confirma además que en 13 temporadas logró 12 plazas europeas.

Queda el compromiso de San Mamés que cierra la Liga, para intentar mejorar la posición en la tabla y buscar al menos un triunfo a domicilio. Pero -entre tanto- el mejor colofón a un curso para enmarcar en Nervión es pelear los tres puntos para agradecer el apoyo del sevillismo y dejar un buen sabor de boca ante el enésimo reto histórico que se avecina. Volverá a haber muchas rotaciones, pero los los jugadores que salgan deben saber qué escudo llevan en el pecho.

El rival andaluz llega en una encrucijada complicada. Se juega seguir en Primera, tras cinco años en la élite, viniendo de 40 años de supervivencia. Sus números en los estadios de los grandes no son buenos como visitante. Sí dio al menos tres zarpazos en Riazor (0-1), Getafe (1-2) y Levante (1-2), sumando 11 derrotas lejos de Los Cármenes. En su debe también cuenta que bastantes puntos se les han escapado en los descuentos o los minutos finales, por no cerrar los partidos. Ahora en dos jornadas, ante Sevilla y Barça, se juega la vida.

El Sevilla, tras el citado 1-2 en 2011, firmó frente el Granada CF tres victorias claras: 3-0, 4-0 y 5-1, que le hace sumar 41 goles por 9 del rival. La última cita en casa fue en noviembre de 2014, con goles de Bacca (2), Banega, Mbia y Gameiro. El gol granadino lo hizo el que sigue siendo su máximo artillero, El-Arabi. El delantero francés de origen marroquí es la esperanza goleadora de los de José González. Suma 5 dianas en tres partidos.

Sus 15 goles en la actual Liga han mantenido vivo al cuadro nazarí, respaldado con otros dos de sus mejores delanteros, Rochina y Success (6 tantos cada uno). El póker anotador lo completa Peñaranda, con 5 goles, jugador que selló la derrota en Los Cármenes de los de Emery (2-1) en la primera vuelta, única derrota del vasco ante este rival y única derrota del Sevilla en 16 derbis andaluces disputados. Success anotó el 1-0, con gol sevillista de Vitolo tras el 2-0. Fue la primera cita de 2016, que confirmaba que el Sevilla no hallaba la fórmula a domicilio.

La reciente victoria (3-2) ante Las Palmas le ha hecho al Granada salir de los puestos de descenso, en un punto, y llega este domingo al Sánchez-Pizjuán sin tirar la toalla. Sólo ha perdido dos de sus últimos ocho partidos. Deberá estar pendientes de otros estadios, evocando tarde de transistores. Desde el prisma sevillista, el equipo afronta su cita número 60 del curso para intentar concluir con una buena imagen en Nervión, peleando en buena lid. Hasta la última cita liguera, juegue quien juegue, los nervionenses deben buscar su mejor versión. Y la mejor forma de celebrar los éxitos europeos es ante el sevillismo, fiel compañero de viaje.   

Crónica facilitada por el Sevilla FC