El Sevilla venció por 1-3 al Stuttgart en Alemania y se distancia de sus perseguidores en el Grupo G de la Liga de Campeones. Los dos goles de Squillaci y el de Jesús Navas sirvieron a los de Manolo Jiménez para traerse a casa una victoria en un partido en el que el conjunto teutón fue superior en ocasiones.
Ángel Espínola. El Sevilla comenzó el partido tal y como acabó el sábado ante el Deportivo, dormido. El centro del campo formado por Lolo y Zokora perdía muchos balones y el Stuttgart, por medio de Boka y Cacau creaba mucho peligro.
Pero en el minuto 23, un córner sacado por Navas hacia Adriano, permitió al brasileño centrar desde el borde del área en un balón que el francés Squillaci remató a gol. El 0-1 llegó en los momentos más críticos del partio. Aún así, el tanto no fue un revulsivo y el Sevilla fue inferior al conjunto alemán durante toda la primera parte. El asistente de Squillaci, Adriano, tuvo que ser sustituido por Diego Perotti, tras sufrir un gole en la rodilla.
El partido cambió en la segunda parte. El Sevilla, sin Luis Fabiano ya en el campo, comenzó a carburar. Perotti fue el gran artífice del cambio de actitud en los de Jiménez. Precisamente el argentino lanzó en el 55 un centro que se envenenó y acabó en el gol de Jesús Navas, que hacía el segundo tras el rechace erróneo de Lehman. En los siguientes minutos, el Sevilla pudo aumentar su ventaja aunque sin acierto goleador.
El Stuttgart, por su parte, echó el resto con tres cambios consecutivos. Pero ni Thomas Hitzlperger ni el ruso Pogrebnyak pudieron atravesar con eficacia la defensa sevillista. Al contrario, fue una falta botada por Dragutinovic la que acabó en la cabeza de Squillaci que hizo el tercero. El Stuttgart recortó distancias inmediatamente con un golazo de falta de Élson.
Sin embargo, llegó tarde la reacción alemana y el partido finalizó, sin más jugadas decisivas, con el 1-3 en el marcador. La victoria del Unirea Urziceni en Glasgow (1-4), facilita la clasificación sevillista para los Octavos de Final.