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Asentado en la quinta plaza el Sevilla, ahora más que nunca, de Unai Emery busca lucir su magnífica progresión ante el Real Madrid en un partido para el que el técnico vasco prepara sus armas.

«Con la derrota del otro día a lo mejor vienen con una pequeña duda, que la pueden disipar en cualquier momento, porque son muy buenos. Para ganar al Madrid hay que hace un partido perfecto en todos los sentidos, en ataque y defensa. Tenemos que encontrar el camino en cómo fortalecer nuestras cualidades y el camino para que ellos no exploten sus individualidades, tenemos que intentar sacar nuestro potencial y reducir el de ellos», ha explicado el de Fuenterrabía.

En la misma línea, ha asegurado que los avances en la clasificación no seducen en absoluto al equipo. «Nosotros solo pensamos en el partido de mañana, la clasificación ahora sí la hemos mirado, porque hemos dado un pasito más, pero ese pasito hay que reafirmarlo. Si estamos quintos es gracias al esfuerzo de todo el equipo y mañana tenemos el objetivo único, único, único, de mantener ese quinto puesto”.

Emery, por otro lado, ha descartado que por las quejas arbitrales de los madridistas tras el partido ante el Barça, el Sevilla se pueda ver perjudicado este miércoles: «La dimensión mediática del Madrid es muy grande, todo tiene una repercusión importante, entonces el domingo hubo decisiones arbitrales difíciles, que creo que tampoco influyeron en el resultado, creo que el partido estuvo por encima de las decisiones arbitrales, pero sí hubo decisiones para hablar y en este sentido es lógico que se hable”.

Asimismo, el preparador sevillista ha insistido en que “lo único que nos concierne es que el árbitro tenga personalidad” y saber “los jugadores que no van a estar por sanción”. “Para mí la repercusión del partido del domingo es que Di María y Sergio Ramos no van a estar, con eso cuento. Creo que sería lo justo es que no jueguen ante nosotros porque esas sensaciones están estipuladas. Contamos que no van a estar. Luego ya las posibles quejas de ellos considero que entran dentro de la normalidad, la diferencia es la dimensión que tiene el Real Madrid».

Preguntado, asimismo, por el posible concurso de Carriço, Emery no ha descartado al luso, aunque ha preferido ser cauto: «Carriço quiere estar. La semana pasada no estaba lanzando un farol cuando dije lo del derbi. Él había probado, tenía unas pequeñas molestias pero quería pasar por encima de ellas. Pero en el último entrenamiento se comprobó que no podía. Lo hemos vuelto a dejar suave, para que se recupere del todo. Para introducirse está cerca, para mañana va a ser precipitado, aunque se podría forzar, porque él quiere y podría soportar el dolor, pero estamos dando prioridad a que se ponga bien y no dé dos pasos atrás, porque está el partido del Oporto con M’Bia y Fazio de baja».

La renovación, más cerca

En torno a su futuro, ha comentado que “las conversaciones informales van en la misma línea desde agosto. Las conversaciones con Monchi, con Óscar Arias, que ahora está más con nosotros con Monchi en Londres, y con Pepe Castro son continuas. Por teléfono o en persona, como las que tenía con Del Nido. Ellos me han transmitido todo el año, desde agosto, que están contentos con el trabajo del cuerpo técnico. Y yo he transmitido que estoy contento trabajando con ellos. Todo se reafirma cuando los resultados ayudan a que se consoliden los objetivos. Pero siempre he priorizado, sabiendo que los resultados dictan, la identificación con el desarrollo de un trabajo, que te da ganar más partidos y estar cerca de los objetivos. La satisfacción constante que he manfiestado sobre el trabajo desarrollado es la primera piedra que hay que poner, y eso ha sido constante. Luego pasar a cuartos eliminando al Betis es un punto más».

Finalmente, preguntado por la posibilidad de hacerse con los servicios de algún jugador para este tramo final por la lesión de Cristóforo, y más concretamente por el nombre de Casemiro, Emery ha señalado que «no es fácil encontrar algo en el mercado que ayude y que se adapte en un mes y medio al rendimiento del equipo. Aún no hemos decidido nada. Ni el presidente ni Monchi ni yo lo tenemos claro. El grupo es fuerte, aunque algo ajustado y alguna lesión nos puede crear problemas, pero no está claro que vayamos a fichar».

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