{jathumbnail off}Se producen muchos cambios en las agrupaciones carnavalescas sevillanas. De la capital prosigue la chirigota de la barriada de Alcosa y dos nuevas agrupaciones juveniles deciden también participar en el concurso carnavalesco gaditano; Dos Hermanas sigue presentando su agrupación y Alcalá de Guadaira debuta con la chirigota “Viva Zapata”.
Raúl Delgado. El Primer Premio en las distintas modalidades del concurso carnavalesco gaditano fueron para «Quo Cádiz» (coro), «Al compás de mi cepillo» (comparsa), «Los combois de pejeta» (chirigota) y «El velatorio» (cuarteto).
Los pregoneros del Carnaval fueron el periodista y escritor sevillano Antonio Burgos y el cantautor granadino Carlos Cano y la Srta. Milagros Bosch Villar la Diosa.
El antifaz de oro del carnaval fue concedido a Pedro Picón Reyes, Carlos Brihuega Rodríguez y Rafael Villa.
La Comparsa de Villegas hijo «España la Nueva», representa una innovación por su afinación y gusto a la hora de interpretar.
CHIRIGOTAS
20.000 vendas de viaje en un vespino (Sevilla)
Al igual que el año anterior, a la chirigota de la barriada sevillana de Alcosa, que este año lleva por nombre “20.000 vendas de viaje en un vespino”, le escribe Manuel Silva. La dirección era de Pedro González.
El tipo representaba a gente de a pie, vendados tras haber tenido un accidente con el vespino que conducían. El nombre del grupo surge cuando los componentes ven a dos de sus compañeros, José Manuel Vázquez y a Antonio Serrano Álvarez “El Canijo”, vendados tras sufrir un accidente en una moto. Fue un tipo original de este último. En un principio la chirigota se iba a llamar «A suero vivo» e iba a representar a doce personas vendadas hasta la cabeza metidas en una cama y enganchadas a un bote de suero, y todo ello tras tener, como se ha dicho anteriormente, un accidente con una moto.
Fueron los últimos en actuar en las preliminares del concurso carnavalesco gaditano, el martes 26 de enero. Pasaron a semifinales y cantaron el viernes 5 y el lunes 8 de febrero.
Llevaban entre otros pasodobles, uno que hacía referencia a la polémica sobre las corridas de toros, donde se nos plantean la pregunta ¿toros sí? ¿toros no? En otro de ellos nos cuentan una declaración de amor a una caballa asá.
Por otra parte, un cuplé sirve para denunciar que la seguridad social que nunca salva a nadie, salvó a su suegra.
Parte del popurrí fue construido con estribillos de agrupaciones carnavalescas.
Actuaron tras su paso por el carnaval gaditano, en unas jornadas de carnaval que se dieron en el Teatro Imperial de Sevilla, en sesiones de tarde y noche, junto a las chirigotas sevillanas “Los conejeros furtivos” y “Los cortaos del faraón”.
En los concursos carnvalescos de la provincia sevillana, participan en Carmona, donde obtienen el primer premio en su modalidad. «Polvos de talco» de Alcalá de Guadaira se llevó el segundo y la local «Del TBO», un primer accésit.
CHIRIGOTAS
Los conejeros furtivos (Sevilla)
A Antonio Pérez Marselle ya no le acompaña en su chirigota como autor de letra, Salvador Fernández Julbez, por lo que de la esta se encarga Mariano Gener Campos. Algunos componentes de anteriores chirigotas de la barriada de Elcano de principios de los años 80, se incorporaron a esta agrupación.
Atrás dejaron “Con volantes y a lo loco” para este año representar un tipo de cazadores furtivos. Algunos componentes iban vestidos de conejos, otros de cazadores, otros de guardias civiles…
Intervinieron en las preliminares del concurso carnavalesco gaditano, el lunes 23 de enero. Marcharon ese día hacia Cádiz con un autobús subvencionado por el Distrito 10 de Sevilla.
Pasan a la fase semifinal de dicho concurso. En su primer pase el viernes 5 de febrero en sesión de tarde, en una de sus letras piden que se les arranque el corazón a los secuestradores de niños si es que éstos lo tienen. El segundo pase, lo tienen en sesión nocturna, el domingo 7 de febrero.
Tras su paso por el carnaval gaditano participan en Carmona, en el concurso de agrupaciones carnavalescas de esta localidad, que por segundo año consecutivo se venía celebrando. Allí obtuvieron un segundo accésit. También obtienen el segundo premio en el recién creado “I Concurso de Chirigotas Maestro Cabrero» de Los Palacios, como vemos en la siguiente fotografía:
En el “I Concurso de chirigotas Maestro Cabrero” de Los Palacios, obtienen el segundo premio.
También participaron en unas jornadas de Carnaval que se dieron en el Teatro Imperial de Sevilla, en sesiones de tarde y noche, junto a las chirigotas sevillanas “20.000 vendas de viaje en un vespino” y “Los cortaos del faraón”.
CHIRIGOTAS
Los vikingos también lloran (Sevilla)
En 1987, un grupo de compañeros del instituto sevillano Ramón Carande, crea una chirigota para cantar en la fiesta de fin de curso. El nombre “El Comisario Paciencia y los obreros de la Expo”, que representaban al Comisario de la Exposición Universal de Sevilla, Sr. Olivenza y algunos trabajadores. Iban vestidos con monos azules de trabajo. Sólo iban con guitarras.
Con esta chirigota se presentaron al concurso juvenil de agrupaciones carnavalescas que se hacía en la sevillana Plaza de San Francisco, donde obtuvieron el tercer premio. Con el dinero que obtuvieron por el premio, se compraron en una tienda de instrumentos musicales de la calle Feria, el bombo y la caja.
A principios del curso siguiente, se piensa de nuevo en hacer una nueva chirigota para la fiesta de fin de curso. Se producen salidas y entradas de componentes. Uno de ellos, Antonio Anguita, plantea al resto de los integrantes, la idea de participar al año próximo en el concurso carnavalesco gaditano. Tras una reunión se decide ir. Se piensa para ello en un tipo de vikingos, con pelucas de colores. Y el nombre “Los vikingos también lloran”. Un nombre con doble sentido ya que lo de también lloran era por la telenovela que en esas fechas se podía ver por televisión “Los ricos también lloran”.
Daban los ensayos en el mismo instituto. La letra y música de esta chirigota la hacía la propia agrupación y la dirección corría a cargo de Antonio Anguita.
Se inscribieron en el concurso carnavalesco gaditano como chirigota juvenil, debido a la corta edad de sus componentes, convirtiéndose por ello en la primera chirigota de Sevilla en participar dentro de la modalidad de juveniles. Les tocó actuar el martes 19 de enero.
Tras su paso por el concurso gaditano, volvieron a participar en Sevilla en el carnaval juvenil, que en esta ocasión se hizo en el Teatro Apolo, cuya final tuvo lugar en la Plaza del Salvador. También participaron en unas jornadas de Carnaval que se dieron en el Teatro Imperial en sesiones de tarde y noche, junto a las chirigotas “Los conejeros furtivos”, “20.000 vendas de viaje en un vespino” y “Los cortaos del faraón”.