Esta propuesta pretende dar respuesta integral a la protección y puesta en valor de la excepcional pieza urbana que constituye el casco antiguo del municipio. Además, se procuran solventar determinadas carencias como son la falta de equipamientos, zonas verdes o espacios libres.
La redacción del documento ha corrido a cargo de un equipo de reconocido prestigio coordinado por el arquitecto Fernando Mendoza, director del equipo, los arqueólogos Fernando Amores y Pedro Pérez Quesada, así como la colaboración de otras administraciones, que han contado con varios representantes de la Consejería de Cultura y Obras Públicas y Urbanismo. Además de incorporar determinadas carencias que tenía el Conjunto Histórico, se va a procurar una conservación mayor de aquellos elementos singulares, como son los molinos y los restos de la cerca de la muralla. Asimismo, otros serán recuperados para equipamiento o expansión urbanística por su adecuada configuración espacial o valores medioambientales.
Por otro lado, se prevé una adecuada protección arqueológica y se proponen interesantes actuaciones como recuperación de parte del viario histórico, tratamientos de entornos de Bien de Interés Cultural y recuperación de edificios históricos para la ciudad, como la Casa del Conde la Maza para biblioteca, el Palacio de los Cuadra para Museo de la Ciudad o el Castillo. Para este último edificio se adquirirán y demolerán varias viviendas para abrir hacia la plaza de Santa Ana y avenida de Fernanda y Bernarda, y un parque de borde y escalinatas hacia la fortaleza, mejorando las entradas existentes y ampliando el uso del monumento.