Sevilla y su Área Metropolitana tienen garantizado el suministro de agua durante los próximos tres años debido a las abundantes lluvias que se han registrado durante otoño e invierno. Los cinco embalses que abastecen a Emasesa y Aljarafesa están al 93 por ciento de su capacidad, con casi 98 hectómetros cúbicos más que hace un año.
Sevilla Actualidad. La población de Sevilla y su Área Metropolitana tienen asegurado el suministro de agua para los próximos tres años. Las abundantes e incesantes lluvias que ha registrado la provincia durante otoño e invierno llevan a que los cinco embalses que abastecen a Emasesa y Aljarafesa superen el 93 por ciento de su capacidad, con 97,64 hectómetros cúbicos más que hace un año.
Los municipios adscritos al Plan Écija –que se abastecen del Retortillo- y Lora del Río tampoco tendrán problemas con el abastecimiento de agua para los próximos tres años. El Sistema del Huesna tiene aún mayor suministro y supera esta garantía en cinco años, tal y como señalan los datos que presentados por la delegada Provincial de Medio Ambiente, Pilar Pérez.
Las lluvias registradas durante estos días han provocado daños materiales importantes. Pilar Pérez ha señalado que los episodios de avenidas inundadas forman parte de la dinámica natural de la Cuenca del Guadalquivir y ha defendido el funcionamiento del sistema durante estos meses diciendo que las infraestructuras para prevenir las inundaciones han respondido “bien”, al igual que los sistemas de alerta y los dispositivos de protección civil.
Por otra parte, Pérez, ha recordado que las lluvias registradas también tienen efectos positivos, no sólo por el aumento de las aguas embalsadas, sino por la recarga de los acuíferos, la fertilización natural de las tierras de cultivo, el aumento de la biodiversidad y el retroceso de la cuña salina en la desembocadura del Guadalquivir.
Igualmente, el Consorcio Provincial de Aguas, reunido siguiendo el lema propuesto por Naciones Unidas ‘Agua limpia para un mundo sano’, ha aprobado una declaración institucional en la que considera el acceso al agua como un Derecho Humano.