Más de 400 escolares han podido pasar dos meses en la provincia de Sevilla lejos de las duras condiciones de vida del desierto.
Esta mañana ha comenzado la operación de retorno a los campamentos de refugiados para los niños saharauis acogidos por familias sevillanas gracias al proyecto Vacaciones en Paz 2011.
De hasta forma, y hasta mañana, los 412 menores despiden a sus familias de acogida en los centros sociales Miraflores, cedidos por la Diputación de Sevilla, de donde parten con su mochila y su caja de alimentos y regalos, rumbo al aeropuerto de Málaga, y de allí por la noche vuelan hacia sus ‘jaimas’ en el desierto de Tinduf (Argelia), donde les esperan sus familiares y amigos que se han quedado en los campamentos.
Lágrimas y sonrisas por los padres de acogida que se despiden por última de vez de estos pequeños embajadores del pueblo saharaui con quienes han convivido estos últimos dos meses y gracias a los cuales han disfrutado de una experiencia enriquecedora e inolvidable, tanto los mayores como los más jóvenes y pequeños niños españoles que se despiden con abrazos interminables de sus “hermanos saharauis”.
Pese a la disminución de familias de acogida en todo el estado español por motivo de la crisis, un año más se han podido conseguir objetivos importantes del proyecto Vacaciones en Paz. Gracias al convenio con el Servicio Andaluz de Salud y el proyecto ‘Quirófano solidario’, dos menores han podido ser operadas en Sevilla y otro niño, que se quedó en la provincia el verano pasado por una enfermedad, se ha recuperado completamente y volverá a abrazar a sus padres después de un año.