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Ángel Luis Orellana Rodas, el falso cura que ejerció durante siete años en una parroquia de Sevilla, fue elegido por el Gobierno local de Alcalá para ser el Cartero Real durante las pasadas navidades. El propio alcalde de Alcalá se dejó fotografiar con el falso sacerdote.

Si Dios le ha perdonado, los hombres también. Es el razonamiento que se habrá producido en el seno del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra donde las pasadas navidades el Cartero Real elegido para recoger las cartas que los niños envían a Sus Majestades los Reyes Magos fue el famoso cura falso de Sevilla. Ángel Luis Orellana, el ‘padre Ángel’, fue el elegido por el Ayuntamiento para encarnar el puesto de cartero real durante el mes de diciembre del pasado año.

En esta fotografía, que publicó el propio alcalde de Alcalá, Antonio Gutiérrez Limones, en su cuenta de Twitter, se muestra cómo el falso sacerdote se rodea del regidor alcalareño, así como el concejal de Fiestas Mayores, Enrique Pavón y la concejal de Igualdad, Consumo y Voluntariado, Ana Vannerau en unos de los actos que el Consistorio organizó durante las navidades.

Según ha podido conocer Sevilla Actualidad, el cartero real es una figura que introdujo el Ayuntamiento hace unos años como complemento a la organización del belén, encargado al responsable de protocolo del Consistorio, Luis Miguel Rivera. Sin embargo, según las fuentes consultadas por esta redacción, se trata de una figura de carácter voluntario y para la cual no existe ningún tipo de regulación, por lo que suele ser nombrada «a dedo».

Ángel Luis Orellana saltó a la fama hace un año y medio después de que el Arzobispado averiguara que había estado ejerciendo como sacerdote siete años en una parroquia sevillana de Santa María de las Flores y San Eugenio sin estar habilitado para ello. El ‘padre Ángel’, durante sus siete años en la parroquia de la barriada de Pío XIII, celebraba las misas habitualmente, e impartía los sacramentos de la comunión, la confirmación o el matrimonio.

El Arzobispado confirmó que una veintena de bodas celebradas por él fueron válidas puesto que para celebrar esta sacramento no era necesario una potestad de la Orden. Y la penitencia impuesta por el arzobispo fue una peregrinación «piadosa» desde la localidad de Alcalá de Guadaíra -donde reside- hasta el santuario diocesano de Nuestra Señora de la Consolación de Utrera.

Ahora, según publicó este lunes Diario de Sevilla, la justicia va a archivar la causa abierta contra el falso sacerdote, instruida por el Juzgado nº 4 de Sevilla, porque «no puede ser objeto de ningún reproche penal». Ninguna de las partes se ha presentado contra él y la única infracción legal que podía haber cometido -mentir al funcionario del Registro Civil- no se consumó ya que los certificados en el Registro los firmaba el párroco titular.

Pese a estos hechos, el falso cura goza de la simpatía del Gobierno municipal de Alcalá -ciudad en la que está afincado- y del máximo mandatario de la localidad que no tuvo reparos en subir a Twitter la foto que muestra la buena sintonía entre el falso cura y los representantes del Gobierno local.

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Nació en Sevilla y pronto supo que lo suyo sería la comunicación. Es licenciado en Periodismo en la Universidad de Sevilla y Máster en Marketing Digital por la Universidad de Málaga. Especialista...