La dirección de Tranvías de Sevilla solicita una mesa de diálogo con el Comité de Empresa para «valorar» sus peticiones y «efectuar propuestas y negociarlas» con «la premisa» de que se desconvoque la huelga organizada por los sindicatos prevista para la semana de feria. La empresa sostiene que las demandas de los trabajadores llegan después de que suscribiesen el Convenio Colectivo Provincial de Transporte de Viajeros por Carretera, vigente hasta diciembre.
El gerente de Tranvías de Sevilla, Santiago Robles, ha defendido que la posición de la empresa ha sido «la de invitar constantemente al diálogo, como acreditan los más de 35 años de trayectoria de paz social y de ausencia de huelgas en la compañía».
El gerente de la empresa manifiesta «no entender» por qué el Comité de Empresa solicita «ahora estas propuestas» cuando «hace menos de 10 meses y tras un proceso continuado de negociación entre Patronal y plantilla, los trabajadores firmaron el Convenio Colectivo Provincial de Transporte de Viajeros por Carretera que tiene una vigencia hasta el 31 de diciembre de 2018, y el Acuerdo que regula su aplicación», ante lo que Robles considera que «se desdicen de su propio acuerdo sin ni siquiera informarnos previamente”.
En un comunicado del sindicato CCOO de Sevilla, los trabajadores denunciaban entre sus motivos para convocar la huelga una «pérdida continuada de poder adquisitivo, el uso de medios audiovisuales como elemento coercitivo de la operatividad», esto es, videovigilancia, «la imposición de modalidades de turnos lesivas para la conciliación de la vida laboral y familiar de la plantilla y jornadas de hasta nueve horas seguidas con solo 13 minutos de descanso».
El gerente de Tranvías de Sevilla asegura respecto a la colocación de cámaras de videovigilancia que cuentan «con todas las autorizaciones necesarias» exigidas por la Ley Orgánica de Protección de Datos y que su uso es «exclusivamente como medida de seguridad» para viajeros, conductores y empresa, alegando que es un elemento que «aporta objetividad en la resolución de conflictos y reclamaciones que se puedan producir en la prestación del servicio».
Tranvías de Sevilla alude a la negociación de un convenio o subida salarial como otro objetivo de la huelga, a lo que asegura que «es un asunto que varía para cada trabajador, dependiendo de sus circunstancias personales, de su actividad, de sus bajas y licencias y otras incidencias que se hayan producido. Y que en cualquier caso se tienen que valorar en un ciclo anual para tener una visión realista y completa». En cualquier caso, la dirección subraya que las retribuciones «también están pactadas en el Convenio vigente».
Respecto a las demandas en lo referente a la conciliación y los turnos laborales, que Tranvías de Sevilla asegura «haber conocido esta mañana a través de los medios de comunicación, y que «ni siquiera están entre las demandas planteadas ante el SERCLA», la dirección argumenta que «todas y cada una de las medidas han sido pactadas por ambas partes y siempre pensando en la mejor solución colectiva».
«Los turnos van cambiando cada semana justamente para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, para que los turnos más duros, de noche o de primeras horas de la mañana, sean más llevaderos y se compartan entre todos los compañeros», defienden desde la dirección. “Resulta muy sorprendente que lo que se acordó antes del verano y se viene cumpliendo con exactitud y puntualidad, se cuestione a estas alturas de año cuando la duración establecida de los acuerdos es hasta 31/12/2018”.
Tranvías de Sevilla declara que la solución «pasa por negociar» y para ello ofrecen «un calendario de negociación productiva y realista sin presiones», que sujetan por ello a «la premisa de desconvocatoria de la huelga prevista a partir del próximo sábado 14 de abril». El gerente concluye el comunicado diciendo que «está dispuesto a negociar, siempre bajo el marco del Convenio Colectivo Provincial», y pide a los trabajadores que consideren plantear la huelga «solo si no se alcanza un acuerdo negociado en un plazo razonable».