Monseñor Carlos Amigo Vallejo, y el alcalde de Los Palacios y Villafranca, Antonio Maestre, han clausurado en esta localidad sevillana los actos organizados por el Ayuntamiento y la Real Academia Sevillana de Buenas Letras para conmemorar el 300 aniversario del nacimiento del sacerdote ilustrado Francisco de Paula Baquero, vecino del municipio y miembro fundador de esta institución cultural en 1751.

Sevilla Actualidad. El acto tenía lugar en el Salón Parroquial de la Iglesia de Santa María la Blanca, en el que el director de la Real Academia, el catedrático de Historia Manuel González Jiménez, ha ofrecido una conferencia sobre la historia y los objetivos de esta institución sevillana ante más de un centenar de personas.

También asistían varios miembros de la Corporación Municipal y numerosos representantes de la Iglesia local.

El cardenal Amigo Vallejo recibió del alcalde, como regalo, una réplica de la torre del templo y una edición facsímil de la Crónica de los Reyes Católicos, de Andrés Bernáldez, conocido como el Cura de Los Palacios.

En su intervención, el Arzobispo, que recordaba sus numerosas visitas a la localidad, señaló que ser palaciego “es una forma de ser, que aúna lo mejor de su historia y se proyecta al futuro” y ha resaltado que es una de las poblaciones con mayor número de jóvenes, “lo que también es una gran responsabilidad”, para señalar que “todo lo que se invierte en estudio, en ciencia y cultura da frutos extraordinarios”.

En este sentido, alabadó la actitud de Francisco de Paula Baquero, “un sacerdote empeñado en que la gente se entendiera, con ideas que sirvan a todos”, y la labor de la  Real Academia Sevillana de Buenas Letras, de la que el Arzobispo es miembro de honor, desde la libertad, la independencia y el respeto a todas las ideas. Monseñor Amigo animó también al alcalde a establecer en el municipio un foro de opinión similar, “un instituto permanente en el que se pueda hablar de todo con el mayor respeto”.

El regidor palaciego, quien agradeció “la presencia del cardenal y su afecto a nuestro pueblo”, indicando que “con esta celebración queremos reconocer los proyectos que nacieron de nuestra tierra hace ya tres siglos, con el empuje de la Ilustración y el compromiso de unos hombres que trabajaron por el progreso, el bienestar y la cultura en un entorno siempre difíciles”. 

Maestre añadió que, “consecuente con estas ideas, el sacerdote ilustrado influyó de forma decisiva en su familiar Juan José Baquero para que creara en el municipio una escuela pública de primeras letras para los niños sin recursos económicos”.

Tras recordar que otros dos palaciegos, el cura Alonso Baquero, pariente de Francisco de Paula, y el escritor Joaquín Romero Murube, formaron parte de la Real Academia, Maestre dijo que el mensaje de De Paula Baquero “no puede ser más actual en estos tiempos de dificultades, que requieren una mayor solidaridad de quienes más tienen” y ha expresado el compromiso municipal “para dar a conocer tanto el patrimonio monumental y cultural como los personajes ilustres de la localidad con el fin de acercarlos a las generaciones jóvenes”.

El catedrático de Historia Manuel González Jiménez, director de la Real Academia, resaltó además la variedad científica de los miembros de esta institución, “que no es un mundo cerrado” y que tiene un papel muy relevante en la conciencia cultural de Sevilla, al ser referente de una visión de la ciudad desde el rigor histórico, la seriedad y el respeto a las tradiciones desde hace más de dos siglos y medio.

El ciclo de conferencias en homenaje del sacerdote lo inauguró en diciembre el profesor jubilado Antonio Cruzado González, cronista oficial de la Villa y autor de varios libros sobre la historia local, que disertó sobre “La Ilustración en Los Palacios y Villafranca”, y siguió con la conferencia de otro de historiador local, Julio Mayo, en la sede de la Academia, donde glosó la figura de Francisco de Paula Baquero.

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