La chica, detenida por la Guardia Civil junto a dos jóvenes más, uno de ellos su novio y menor de edad, había sustraído hasta 90.000 euros en artículos de valor de sus familiares. La menor detenida conocía que la vivienda de Camas en la que vivían su madre y su abuela estaría vacía el día en el que los agentes creen que se cometieron los hechos.
Sevilla Actualidad. Eran de su madre y de su abuela, pero es algo que no le había importado. La menor, detenida por los agentes de la Guardia Civil de Olivares, en Sevilla, había llegado a sustraer hasta 90.000 euros en joyas de sus familiares.
El cuerpo de la Benemérita, que la ha detenido esta misma mañana junto a dos amigos suyos, entre ellos otro menor, la acusa de un supuesto delito de robo con fuerza en las cosas y venta de efectos sustraídos.
Curiosamente, la investigación de los hechos, ocurridos en una vivienda de la vecina localidad de Camas, comenzó tras denunciar la madre de la posteriormente detenida que había sido víctima de un robo con fuerza en las cosas en su domicilio. La denunciante declaró a los agentes que le habían sustraído joyas suyas y de su madre, que es la propietaria de la vivienda, valoradas en unos 90.000 euros, tras lo que la Guardia Civil sospechó que se había utilizado una llave de la vivienda para entrar, pues la cerradura estaba en perfecto estado.
La mujer, al ser preguntada sobre este aspecto por los agentes, también comunicó que días atrás se había percatado de la desaparición de una copia de las llaves de la casa que estaban en una habitación y que ya no se encontraban en ese lugar.
Tras distintas indagaciones, los agentes tuvieron conocimiento de que la nieta de la dueña de la vivienda e hija del denunciante había estado en esa habitación en las fechas en las que desaparecieron las llaves. También descubrieron que la menor, que vive habitualmente con su padre y no tiene contacto con su madre, conocía por una llamada de teléfono que su progenitora estaría fuera de la vivienda el día que se cometió el robo, informa la Guardia Civil.
Ante esta sospecha, y después de varias gestiones, los agentes averiguaron que, junto a la menor, participaron en la sustracción otros dos jóvenes: el novio de la chica, también menor, y un amigo de ambos mayor de edad.
Aunque los pequeños cacos ya han sido detenidos, la Guardia Civil continúa las indagaciones con el objetivo de encontrar los efectos sustraídos, que supuestamente fueron vendidos, pues a la menor se le encontraron 961 euros procedentes, según todos los indicios, del pago de parte de las joyas.
Fruto de la investigación, los agentes han constatado que los tres implicados, cuyas identidades no se han facilitado, intentaron vender las joyas, para lo que se sirvieron del mayor de edad, y de este modo la Guardia Civil ha encontrado en dos establecimientos de compraventa de oro parte de los efectos sustraídos y se los ha devuelto a sus propietarias.