La vecina de Espartinas Lola Villar ha iniciado este jueves una huelga de hambre a las puertas del Ayuntamiento tras entrevistarse con el alcalde.

Villar se considera “discriminada injustamente” en la contratación del programa municipal para personas en situación de exclusión social de la Junta de Andalucía.

En la Junta de Portavoces de esta misma mañana, IU ha solicitado al alcalde la fiscalización de la baremación que ha dado el resultado de las contrataciones: 18 empleos, a tres meses de duración unos y a un mes y medio otros, para servicios de conserjes escolares, monitores escolares y deportivos y peonaje de limpieza.

El alcalde ha mostrado su reticencia a esta fiscalización por entender que es un trabajo de los técnicos de Asuntos Sociales Comunitarios del Ayuntamiento, cuya baremación responde a los requisitos de la convocatoria y a la que han concurrido las personas demandante de la contratación. «No seré yo quien cuestione el trabajo de los técnicos», asegura el alcalde.

Mientras tanto, el Ayuntamiento asegura, a través de un comunicado, que “el proceso de baremación del personal y su selección ha sido realizado por los técnicos municipales del Ayuntamiento de Espartinas, sin intromisión del equipo de Gobierno”.

“Este Ayuntamiento, aunque confiamos plenamente en el trabajo realizado por los técnicos y ante la petición de una vecina que no ha sido seleccionada en el proceso, encargará la revisión del mismo a un técnico homologado y se invitará a los grupos políticos de la oposición a qué participen en él. La revisión se concluirá antes del 24 de septiembre”, añade.

“El Ayuntamiento ha prestado ayuda urgente a este vecina para que acometa el pago del alquiler y los suministros básicos”, al tiempo que lamenta “el uso que algunos grupos políticos están haciendo de la desesperante situación de esta vecina”.