La supuesta homicida al creer que la víctima estaba muerta, incendio la vivienda para ocultar el crimen. El posible móvil del robo sería el robo de las joyas de la víctima.
En la madrugada, del pasado 28 de agosto, se recibe una llamada telefónica comunicando que se había producido un incendio en una vivienda, de la localidad de Lebrija. Al lugar se desplazan varias patrullas del Cuerpo, junto con Policía Local y bomberos. Ante la posibilidad de que hubiera personas en su interior, los agentes fuerzan la puerta y encuentran a una persona que yacía decúbito supino, en el suelo del dormitorio.
Esta persona es trasladada a un centro sanitario, donde los facultativos, le diagnostican un fuerte golpe en el cráneo, seis heridas incisas en el cuello, dos en el tórax y además sufre inhalación de gases procedentes de la combustión, por lo que temían por su vida.
Tras entrevistarse con los vecinos y realizar diferentes pesquisas, así como una exhaustiva inspección ocular, se sospecha de una mujer que lo visitaba frecuentemente y que se encontraba desaparecida. El posible móvil de la supuesta autora podía ser el robo, ya que habían desaparecido; dos anillos, un reloj de oro, pulsera y cordón del mismo metal y un teléfono móvil.
La Guardia Civil busca a la mujer y al tener conocimiento de que pudiera estar por la zona de Utrera, realiza distintas indagaciones en la zona, consiguiendo localizarla caminando por una calle de Utrera.
La detenida es llevada a dependencias de la Guardia Civil, donde manifiesta en su declaración que asestó varias puñaladas y golpeó varias veces con una plancha a la víctima. Además, declara que utilizó un acelerante de la combustión para provocar el incendio, al creer que la víctima había muerto.
Por estos hechos la mujer de 31 años, es puesta a disposición del Juzgado de Guardia de Lebrija, como supuesta autora de los delitos de asesinato en grado de tentativa, robo con violencia e incendio.