Padres y niños de una pedanía de Alcalá del Río cortan esta mañana una carretera para reclamar un nuevo colegio. Educación dijo que el proyecto, aprobado desde hace años, «ha prescrito». Los alumnos de Esquivel estudian en seis caracolas y la fiesta de Navidad la hacen en una nave de almacenamiento de algodón.

Sevilla Actualidad. Padres y niños del colegio público Nuestra Señora del Carmen de Esquivel, una pedanía de la localidad de Alcalá del Río en la Vega del Guadalquivir, cortarán en mañana mañana de hoy la carretera de acceso a la población , que une Alcalá del Río con Villaverde, para reclamar a la Delegación provincial de Educación de la Junta de Andalucía que cumpla su compromiso de construir un nuevo colegio.

«Hace mucho que se aprobó la construcción del nuevo colegio de Esquivel, debería haber estado terminado para el curso pasado», pero no sólo no han empezado las obras,  desde la Delegación de Educación dicen «que el proyecto ha prescrito, que habría que empezar de nuevo», explica con indignación un portavoz del AMPA ‘La Unión Esquiveleña’ del colegio Ntra. Sra. del Carmen.

Los más de 80 alumnos del colegio de Esquivel estudian hasta ahora repartidos en unas instalaciones «precarias» formadas por seis caracolas situadas junto a una fábrica, donde el paso de camiones es una constante. «No hay gimnasio y no se puede organizar ninguna actividad, para la fiesta Navidad hay que irse a un antiguo almacén de algodón», añadió la portavoz del AMPA, quien precisó que «hasta un cable de tensión pasa por encima del centro».

Ante tal situación remitieron un escrito al delegado provincial responsable del área de Educación en Sevilla, José Jaime Mougán, para transmitir la «decepción e indignación con respecto al retraso en la construcción del centro, en esta ocasión aduciendo problemas en el proyecto» y criticar el nuevo parón «que defrauda las expectativas creadas, y los compromisos adquiridos».

Protestas ante el silencio administrativo

A pesar de la obligación que los responsables políticos tienen de dar respuestas en un periodo de quince días a las reclamaciones de la ciudadanía, en este caso no ha sido así.  Es lo que se denomina «silencio administrativo», cuando una administración pública no responde a una solicitud o a un recurso en el plazo que tiene establecido para ello.Los vecinos de Esquivel critican que hasta el momento no han obtenido respuesta alguna a éste ni a ningún otro  requerimiento que han elevado al delegado provincial de Educación.

Por todo ello han aprobado un calendario de movilizaciones que arranca con el corte de la carretera de acceso a Esquivel, tras recorrer las calles de la pedanía, desde las 9:00 horas de la mañana. La misma hora en la que sus hijos deberían entrar al colegio con normalidad.

Asimismo, la AMPA anuncia que las protestas continuarán esta semana, y hasta que la administración cumpla con los vecinos. El jueves y el viernes los niños no entrarán tampoco al colegio de Esquivel. Al lunes siguiente, si la administración continúa desatendiendo la demanda de los ciudadanos y no hay una respuesta favorable de Educación, los vecinos afectados acordaron intensificar sus protestas acudiendo hasta la capital hispalense para manifestarse a las puertas de la Delegación provincial y ante el Parlamento andaluz.

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