Dulces de Convento 3

La muestra, que  tendrá lugar hasta el domingo 9 de diciembre, se ha convertido en el lugar más cómodo de la provincia para adquirir los dulces de las monjas, con una variedad de más de cincuenta dulces artesanos de ocho conventos de Sevilla.

La IV Muestra de Dulces Navideños de Conventos ha atraído a Tomares desde el primer día a numerosos vecinos y visitantes de otras localidades, para adquirir la afamada repostería de las monjas, una elección nada fácil, pues se puede elegir entre una variedad de más de cincuenta dulces artesanos de ocho conventos de Sevilla.

Desde por la mañana temprano se ha podido ver a un continuo ir y venir de gente en el Patio de la Fuente del Ayuntamiento. Este céntrico enclave acoge durante tres días la muestra, desde hoy viernes día 6 y hasta este domingo 8 de diciembre, que permanecerá abierta por las mañanas de 12 a 15 horas y por las tardes de 17 a 19 horas. Aunque muchos no han querido esperar y han aprovechado el día festivo para empezar con la tradición de los dulces navideños, haciendo gala en sus mesas de la mejor repostería artesana.

Una iniciativa del Ayuntamiento, en la que participan cinco asociaciones del municipio, que durante tres días se han puesto tras las vitrinas para recaudar fondos para cada uno de sus fines. Participan Caritas de Tomares, Fibroreto, Mujeres en Igualdad, el Centro de Orientación Familiar y Tomares Comparte. Todo sea por una buena causa.

Se pueden adquirir dulces del Convento de San Leandro  (Sevilla); Convento de Santa Paula (Sevilla); Convento de la Purísima Concepción Santa María, 
(Clarisas de Marchena); Convento de Nuestra Señora de los Ángeles (Jerónimas de Constantina); Convento de la Purísima Concepción (Franciscanas de Lebrija); Monasterio de San José (Carmelitas de Dos Hermanas); Convento Santa María La Real (Dominicas Bormujos); y del Horno de la Milagrosa (Bormujos).

Exquisitas recetas centenarias, desde las yemas de San Leandro, los bizcochos marroquíes de las hermanas franciscanas de Lebrija o las chulapillas de las Clarisas de Marchena, hasta pasteles modernizados como los escudos del Sevilla, el Betis, el Madrid o el Barcelona, de las jerónimas de Constantina. Pasando por recetas tradicionales como el tocino de cielo de las carmelitas de Dos Hermanas, las mermeladas de frutas artesanas del convento de Santa Paula de Sevilla, las tortas de polvorón de las franciscanas de Lebrija, los pestiños y roscos de vino de las dominicas de Bormujos. 

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