Investigadores de la Universidad de Córdoba han descubierto en el mausoleo de Carmona un líquido conservado desde hace 2000 años. Ha sido el Departamento de Química Orgánica de la Universidad quien ha estudiado un líquido «rojizo» encontrado en una urna de vidrio que contenía huesos de una persona.
Los investigadores creen que podría tratarse de una «disolución acuosa de esencias de plantas aromáticas», descartando la posibilidad de que se tratara vino o aceite, tal y como adelantan desde Europa Press. Ésta vasija fue encontrada en una cámara sepulcral descubierta en una vivienda de la calle Sevilla de la localidad carmonense, donde se encontraron ocho nichos con seis vasijas o urnas distintas.
Estas urnas contenían no solo huesos humanos, también restos de ungüentos y pertenencias de los fallecidos. El hecho de que se pudiera conservar este líquido prácticamente en perfecto estado se debe a las «condiciones ambientales» de la cámara funeraria, tal y como declaraba el arqueólogo municipal de Carmona, Juan Manuel Román.
Estas seis urnas, dos de vidrio y cuatro de piedra, conservaban también el tapón que protegía el contenido de las mismas, otro factor que influyó en la conservación de los restos encontrados.
La ‘vía híspalis’ sale a la luz
La ‘Vía Híspalis’ continua saliendo a la luz en el Conjunto Arqueológico de Carmona, con las últimas excavaciones que se vienen realizando en la zona.
Dicho estudio geofísico ‒que se llevó a cabo con técnicas mínimamente invasivas y respetuosas con los bienes como el georradar, la prospección magnética y la tomografía eléctrica‒ se realizó en tres zonas del Conjunto Arqueológico de Carmona, abarcando una superficie total de 12.700 m2: la finca Huerto Casquizo, propiedad de la Junta desde 1978 que sólo servía, hasta la fecha, para el pasto de ganado; la antigua vía a Híspalis y la loma existente en la entrada del yacimiento, junto al Mausoleo Circular del Campo de los Olivos.
La actuación arqueológica ‒la mayor realizada, tanto en extensión como por sus resultados, en la necrópolis de Carmona en los últimos cincuenta años, desde que en la década de los setenta del siglo XX se excavó el anfiteatro‒ reveló la posible existencia de más de 240 estructuras susceptibles de ser enterramientos, hallazgo que supondría casi duplicar el número de tumbas actualmente conocidas y, como consecuencia, abrir una nueva etapa para el conocimiento y la puesta en valor del Conjunto Arqueológico.