Un incendio calcina la nave de Frutosol
Los trabajadores confían en que, una vez evaluados los daños, la gerencia de la empresa decida recuperar el centro de producción de Mairena.
Los trabajadores de Frutosol, la empresa exportadora de frutas de Mairena del Alcor calcinada en su casi totalidad el pasado viernes por la tarde, han mantenido este mediodía una prolongada reunión con miembros de los tres ayuntamientos de los que básicamente proceden sus trabajadores, la propia Mairena junto a El Viso del Alcor y Alcalá de Guadaíra.
Trabajar juntas las tres instituciones y el Comité de Empresa de la factoría ha sido la primera y más importante decisión adoptada con relación al deseo compartido de que la factoría renazca pronto de sus cenizas para colmar las necesidades, ilusiones y esperanzas de sus más de 200 empleados, casi todos presentes en la reunión.
Fue la primera de las peticiones atendida por parte de los afectados y refrendada por las autoridades presentes, planteada por el sindicalista Emilio Torrón del Comité de Empresa. No fue la única, pero sí un buen punto de partida tras atemperar los nervios lógicos de los empleados de la factoría, en su mayoría mujeres. Ir de la mano, pues, pero antes se requiere para ello que la empresa se posicione con respecto al futuro del centro de producción. A partir de ahí la interlocución será primero entre la gerencia de Frutosol y los sindicatos y, luego, con los representantes de los tres consistorios.
El acuerdo contempla de igual manera que se trabaje al unísono con las tres instituciones, que al ser administraciones públicas sustentan por lógica no sólo esa capacidad sino además la posibilidad de articular medidas que hagan avanzar un proceso de vuelta a la normalidad, que a pesar de las dudas de algunos trabajadores mantiene encendida la llama de la ilusión de la mayoría, empleados y autoridades. La tasación de los daños se espera, ya que las instalaciones estaban aseguradas. Es otro de los elementos que pueden influir en la decisión.