Los padres del colegio San Blas se sienten más seguros. Sus hijos no comenzarán el nuevo curso en las instalaciones de este centro escolar que presenta una “gran inestabilidad debido al escarpe en el que se encuentra”. Varios informes técnicos avalan una situación que los padres llevan denunciando durante varios años.

Manuel Torres. Algo más de 200 escolares de entre 3 y 12 años no volverán a sus clases. El Ayuntamiento de Carmona ha decidido tomar medidas ante la situación de hacinamiento y sobre todo de seguridad que padecían los pequeños del colegio San Blas. 
En el último pleno municipal se ha aprobado una moción institucional de apoyo a estas reivindicaciones. De este modo, los tres grupos con representación municipal, PSOE, PP e IU,  secundan las peticiones de los padres y se comprometen a continuar los contactos con la Delegación Provincial de Educación, competente en la materia. 
Todos los informes técnicos y la información obrante en el Ayuntamiento ya ha sido puesta a disposición de Educación para tome cartas en el asunto. La concejala de Educación, Ana López, ha anunciado que a lo largo de este mes se movilizarán las tierras inestables del barranco por lo que previamente habrá que desmontar la caracola trasera del centro. Asimismo, se ha comprometido a buscar la mejor solución para el realojo de los alumnos. 
En  este sentido lo padres han afirmado que “no admitirán desdobles de turnos de tarde, la diseminación de los alumnos y por supuesto que desaparezca el colegio San Blas como tal”.  
Otra de las reivindicaciones que persiguen es la construcción definitiva del nuevo instituto en la calle Guadalete. Tras varios retrasos, estaba prevista su inauguración en 2008, los padres consiguieron una respuesta de Educación en la que se comprometían a su puesta en marcha para el curso 2010-2011. “A fecha de hoy no se ha redactado ni el proyecto, por lo que nos tememos que volverán a incumplir los plazos”, sostiene la presidenta del AMPA, Mª Dolores Burgos. 
SEGURIDAD. El emplazamiento del centro, “en una zona potencialmente inestable”, es el mayor temor de los padres y una prioridad para el Ayuntamiento. De este modo según reza en el informe realizado por el arquitecto, Emilio Yanes, “el centro se sitúa en un vértice de la meseta de Carmona que lo hace susceptible de posibles regresiones del cantil del Arbollón”. Además, estudios geotécnicos previos ya evidenciaron que el edificio se cimienta sobre rellenos incompetentes. 
Del lado contrario el informe indica que, pese a la falta de seguridad, durante el periodo comprendido entre 2006 y 2008 no se han encontrado daños estructurales achacables a movimientos geofísicos. Si se presentan en el terreno donde está asentado el centro con dos grandes grietas donde cabe una persona. 
El alcalde de Carmona, Antonio Cano (PSOE),  mantendrá una nueva reunión en las próximas semanas con los representantes del AMPA para transmitirles las novedades sobre la nueva distribución de los escolares.
 

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