Las fuertes rachas de vientos que se han registrado esta tarde en la provincia de Sevilla han provocado algunos incidentes, como el ocurrido esta tarde en Los Palacios.

La cruz de la torre de la Iglesia Santa María la Blanca de Los Palacios y Villafranca se ha desprendido esta tarde. Posiblemente a consecuencia de las fuertes rachas de viento que se han registrado en la provincia. De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado para este martes el aviso nivel amarillo por vientos. La previsión eran de rachas de hasta 70 kilómetros por hora.

Hasta el lugar se han desplazado bomberos del Parque de Los Palacios para recuperar al cruz, que ha quedado colgada en un lateral de la torre. Asimismo, la zona ha sido asegurada para evitar daños mayores. Ninguna persona se ha visto afectada por el desprendimiento.

Iglesia de Santa María la Blanca

Este templo parroquial se levantó en el siglo XV, a expensas de la Casa de Arcos que ostentaba el señorío de la villa de Los Palacios. Los Ponce de León tenían especial devoción por la advocación mariana de la Nieves -Patrona de la ciudad de Arcos– y así lo demostraron consagrando el templo de Los Palacios a ese patronazgo, como hiciera en otros lugares de su señorío.

No era desde luego aquel templo que se construyó en el siglo XV como el actual, ni en forma ni en tamaño. Se trataba, según las referencias que dejó por escrito Andrés Bernáldez, de una construcción de estilo mudéjar, con planta rectangular dividida en tres naves, de las que la central era algo más alta que las laterales. No tenía cúpula ni bóvedas y comprendía desde donde se encuentra el altar mayor hasta el coro. La primitiva sacristía era lo que ahora es la capilla de Nuestra Señora del Rosario y parte del altar mayor, siendo el resto desahogo o corral, así como lo que hoy es capilla del Santísimo Cristo de la Salud.

La torre data de 1724

El templo original no tenía torre sino campanario y, debajo de él, una única puerta que llamaban del Perdón, que daba a la calle que ocupaba entonces lo que actualmente es coro y que, por tanto, miraba a poniente.

No obstante, han sido tantas las obras de transformación, ampliación y embellecimiento a las que se han visto sometido en épocas diferentes, que resulta sumamente difícil –por no decir imposible- determinar su estilo arquitectónico que constituye una suma de aportaciones, barrocas y neoclásicas fundamentalmente, que muestran como resultado final la hermosa construcción que hoy conocemos.

La primera gran obra de ampliación del templo parroquial se realiza en los primeros años del siglo XVII. Las obras, que finalizaron en el año 1.619, consistieron en el levantamiento de toda la techumbre de la nave central, elevándola dos varas y media sobre su primitiva altura, al tiempo que se macizaron los pilares de la capilla mayor y se le agregaron a esta lo que hasta entonces había sido sacristía y corral y se añadió al edificio una nueva sacristía y otras dependencias anexas

Pero la ampliación del templo no solo se realizó por la parte de su cabecera, sino que además creció por el extremo opuesto, ya que se construyó, también entonces, el coro actual y la hasta hace poco capilla bautismal, en terrenos que hasta aquel momento eran de la calle. No desapareció la Puerta del Perdón que, simplemente avanzó hacia el oeste con la ampliación del templo.

La segunda de las grandes reformas del templo de Santa María la Blanca se llevó a cabo en la segunda mitad del siglo XVIII. Estas obras, que se pueden considerar como remate del templo, consistieron en la construcción de la cúpula, bóvedas tapando las maderas de la techumbre, suelos de mármol y arreglos del porche con el cerramiento de la puerta del Perdón y la apertura de las dos actuales. Previamente, en momentos diferentes del siglo XVIII, se habían realizado otras mejoras del templo: la construcción de la torre, que sustituyó al antiguo campanario, en el año 1.724.

Licenciado en Periodismo. Actualmente en Sevilla Actualidad y La Voz de Alcalá. Antes en Localia TV y El Correo de Andalucía.