Ante los nuevos brotes de Covid-19 detectados en todo el territorio nacional y como medida de prevención, la Policía Local de Gines, de forma coordinada con el propio Ayuntamiento, está desarrollando en estos días una intensa campaña de control y vigilancia enfocada a velar por el correcto cumplimiento de las normas de seguridad establecidas y evitar así repuntes del virus.
Como resultado, se han interpuesto un total de 40 denuncias tan solo este pasado fin de semana en la localidad y se han llevado a cabo actuaciones policiales que llevan aparejadas sus correspondientes sanciones económicas. En la mayoría de los casos se han denunciado a personas, sobre todo jóvenes, que se encontraban en concentraciones en vías o espacios públicos donde no se respetaba la distancia social de 1,5 metros y además, no se llevaba mascarilla o se hacía un mal uso de ésta.
Tal y como se recoge en el Real Decreto Ley 21/2020 de ‘Medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19’, publicado en el BOE el 10 de junio, «es obligatorio el uso de mascarilla en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público, siempre que no resulte posible garantizar el mantenimiento de una distancia de seguridad interpersonal de, al menos, 1,5 metros». Su incumplimiento puede llevar acarreado sanciones de hasta 100€, cuantía de las multas impuestas en la localidad.
Según palabras de propio Alcalde, Romualdo Garrido “hemos endurecido nuestra línea de actuación para acabar con situaciones que se repiten a diario y que ponen en serio riesgo la salud de toda la población. No vamos a permitir que la inconsciencia de unos cuantos repercuta en el resto de vecinos y vecinas de nuestro pueblo que sí respetan las normas, y menos después de todo lo que hemos pasado. No podemos olvidar que aún estamos inmersos en una crisis sanitaria y que el peligro sigue estando ahí”.
Con el objetivo de evitar posibles rebrotes, Gines ha intensificado la vigilancia en calles y espacios públicos, y un mayor control policial para la aplicación de la normativa vigente.