El monumento, construido en el Siglo I d.C., es una de las cuatro puertas romanas de Carmona.
El alcalde de Carmona, Juan Ávila, ha remitido un escrito a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía solicitando la colaboración de la administración autonómica para preservar el estado de conservación de la Puerta romana de Córdoba de la localidad.
En el escrito dirigido al delegado provincial de Cultura, el alcalde señala su preocupación por una grieta en este monumento que fue detectada en el año 2010 y que desde entonces ha ido creciendo de tamaño.
En concreto, la grieta se localiza en la torre norte de la Puerta de Córdoba y, según los informes técnicos, cuestiona la estabilidad del monumento declarado Bien de Interés Cultural.
La Puerta de Córdoba, construida en el s.I, es una de las cuatro puertas que tuvo Carmona en época romana y que permitían la comunicación entre la ciudad amurallada con el exterior, siendo además la única puerta romana de tres arcos, de carácter defensivo, que existe en la península ibérica.
El monumento destaca por su valor estratégico y su emblemática ubicación como único acceso visible de Carmona desde la vega lo que debió de influir en su composición a modo de porta triunfalis, dado el carácter propagandístico para el que fue concebida con toda probabilidad.