Mina de Cobre las Cruces./ SA

Ecologistas en Acción denuncia que el derrumbe afecta a 675.000 m2 ocupados por residuos no inertes contaminantes y taludes de la corta minera, con una longitud de desplazamiento de 1300 metros, desde la instalación de estériles de minas hasta el fondo de la corta minera.

Los ecologistas califican como «muy poco creíble» que un derrumbe de tal magnitud no haya sido detectado con antelación por parte de los servicios técnicos de la mina ya que, según explican en un comunicado, no se ha producido ningún fenómeno natural de relevancia que lo haya podido provocar.

«Una vez más la empresa Cobre Las Cruces ha mentido y las dimensiones y consecuencias del derrumbe han sido mucho más importantes que lo informado», critican desde Ecologistas en Acción.

Además, «se ha hundido el talud norte de la corta y se ha sepultado la boca de entrada de la galería subterránea que terminaron de construir hace un año», asegura la asociación. Los ecologistas sostienen que un colapso de la IET podría verter residuos muy contaminantes y peligrosos al arroyo Garnacha.