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Ganaderos, expositores y comerciantes se reúnen en 190.000 metros cuadrados del Centro IFAPA de Los Palacios.

Cientos de visitantes acuden desde este mediodía a la XVII edición de la Feria Agroganadera y Comercial de Los Palacios y Villafranca que tiene lugar hasta el domingo, 1 de mayo, en el Centro del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera y Alimentaria (IFAPA) de esta localidad, situado a tres kilómetros del casco urbano. El recinto, de 190.000 metros cuadrados, acoge a más de 4.000 cabezas de ganado y unos 500 propietarios entre ganaderos, expositores y comerciantes. La muerta ha sido inaugurada por el alcalde Antonio Maestre, que ha estado acompañado por un grupo de concejales.

Todos han visitado los expositores y han recorrido las instalaciones ganaderas, donde han departido con empresarios y tratantes de ganado. También ha asistido a la elaboración de un gazpacho campero en la zona de la Asociación ‘La Era’, donde se reproducen antiguas tareas agrícolas. Durante la mañana se ha producido el hermanamiento entre el grupo de desarrollo rural del Bajo Guadalquivir Adelquivir y la Asociación para el Desarrollo Rural de la Montaña de Navarra, Cederna/Garalur.

Además, la Asociación de Productores del Tomate ha presentado de forma oficial las pegatinas con el logotipo Marca de Garantía Tomate de Los Palacios, paso previo a la obtención de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) que concede la Unión Europea.

El regidor palaciego ha destacado que esta cita “se alza ya como un referente único para el mundo del caballo no sólo del Bajo Guadalquivir, sino de gran parte de Andalucía. Las ramificaciones del certamen también se ha extendido en estos años a otras comunidades autónomas e incluso al extranjero, desde nos llegan ganaderos interesados en la pujanza de nuestro sector caballar y de nuestros productos hortofrutícolas, lo que da idea de su notable proyección exterior”. Maestre ha valorado “el esfuerzo realizado para ofrecer a vecinos y visitantes las mejores instalaciones en las que disfrutar de las propuestas de ocio, al tiempo que impulsamos los intercambios económicos en la zona ganadera y las ventas del área expositora”.

La feria, que tiene entre sus atractivos la reproducción de la vieja tradición del trato y el apretón de manos para la compra-venta de animales, se ha consolidado en estos diecisiete años como una de las más importantes referencias del sector ganadero de gran parte de España y numerosos puntos del extranjero. A la espera de que el tiempo acompañe, las instituciones y entidades organizadoras esperan unas 60.000 visitas y un volumen de negocios que podría superar los dos millones de euros.

Para ello se confía en un crecimiento notable de la actividad comercial y de compra venta de ganado, gracias a  la proximidad de la Feria de Sevilla, que comienza el 3 de mayo. Junto a ganaderos locales y del entorno, la feria contará con la presencia de empresarios y particulares de diversos puntos de Andalucía, Cataluña, Valencia, Galicia, Castilla-León o Castilla-La Mancha, así como de Francia, y compradores de varios países centroeuropeos.

Las transacciones son muy cómodas, ya que ésta es la única feria ganadera de Andalucía Occidental en la que el ganadero puede comprar o vender con la transferencia hecha al momento. Para ello un equipo de veterinarios se encarga de facilitarles  y de sellar la guía del ganado.

A estas operaciones hay que sumar las ventas realizadas por el medio centenar de expositores participantes, entre tiendas de artesanía, cooperativas y empresas agrícolas, pequeños comercios, concesionarios de vehículos y maquinaría agrícola. También estarán representados grupos agrarios, como la Cooperativa Las Nieves o Frupal, empresariales como Juvasa, instituciones, como la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir, la asociación de empresarios locales Alacipa y organizaciones agrarias como COAG y Asaja.

Los organizadores destacan que “el mundo del caballo y su entorno son sectores que cada vez tiene más relevancia en la creación de empleo y riqueza en el municipio y el resto de la comarca del Bajo Guadalquivir al aunar aspectos económicos y lúdicos nuevos al tradicional uso de los animales en las tareas del campo”. Además, el certamen es una interesante muestra de la agricultura palaciega, que cada temporada coloca en los mercados más de 50 productos hortofrutícolas de primerísima calidad.
El recinto dispone de unos amplios  corrales para exhibir a los animales y realizar los tratos de compra venta y carpas que albergan a los numerosos expositores comerciales y servicios de bebida y comida, así como de una gran plaza central con graderíos, que acoge exhibiciones y concursos. Cuenta con un Plan de Seguridad y Emergencia, en el que colaboran los Servicios Municipales de Emergencias,  agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, Bomberos, voluntarios de Protección Civil y vigilantes privados. También hay un servicio médico con ambulancia.

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Licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla, empezó en la comunicación local y actualmente trabaja para laSexta. Máster en Gestión Estratégica e Innovación en Comunicación, es miembro...