Esta semana el sistema nervioso de London ha sido interrumpido. Me refiero a las principales líneas de metro. Incontables personas han saboreado una huelga de varios días en sus propias carnes, pagando un precio que, en principio, es ajeno a ellos, o quizás no.

“Yeh, this one's for the workers who toil night and day

CONTENIDO EXCLUSIVO

Puedes hacerte socio o registrarte gratis

Si estás registrado o eres socio inicia sesión

Natural de Sevilla; en la Rábita, el mar me bautizó; aprendí a caminar y hacer travesuras como cazallero; en Dos Hermanas la escuela me dio alas, la Hispalense un motor; luego en México, bravura y...