Hay gente empeñada en defender el cine español a cualquier precio. Hay gente empeñada en atacar el cine español a cualquier precio, generalmente con un curioso discurso político de fondo… Hay gente a la que simplemente nos gusta el cine y sólo buscamos ver buenas películas; aunque la definición de «buenas películas» no sea algo que se pueda generalizar.

Escuchando un corte de la película de ‘El Niño’ en la Ser, algún o alguna idiota (lamento no recordar quién), dijo algo del tipo «este corte no era de Ocho apellidos vascos ¿eh? no se confundan». ¿Confundir? Habría que ser rematadamente obtuso para confundir una peli de acción policiaca con el paroxismo de los tópicos sólo porque se escuche un corte de gente hablando en andaluz, pero ¿qué voy a contarles de la ignorancia superlativa que rodea el tratamiento de nuestro acento que no sepan ya?

Esta película cuenta con unos protagonistas que se diría que no actúan; durante toda la cinta da la sensación de que son así. En la película no se muestra la vida de La Línea o Algeciras, no es una generalización, pero sí se cuenta una realidad que existe y es innegable que existe. En esta película los buenos no son tan buenos y los malos no son tan malos, y a unos y a otros se les coge cariño… La pega podría ser la que apuntó mi hermano, con el que mantuve un coloquio a la altura de aquellos míticos y ahumados debates de Garci… ¿No podían haber puesto algún policía andaluz? Dechent habría estado genial en algún cometido de estos… pero lo cortés no quita lo valiente y el reparto es notablemente bueno.

A veces, cuando me encuentro una rara perla de este tipo me pregunto demasiadas cosas… ¿era tan complicado hacer algo tan bueno? puede que sí ¿era tan difícil hacer una película sin complejos, sólo contando lo que se quería contar?

Puede que conmigo Daniel Monzón tuviera medio trabajo hecho, no por su éxito como director, sino porque quienes ya habíamos leído algún reportaje de ‘El Pájaro’ o nos habíamos perdido en las páginas de ‘La reina del Sur’, teníamos la sensación de conocer ya aquello, de haber visto al helicóptero a la caza de las embarcaciones, de conocer el momento crítico en que es mejor tirar los fardos, teníamos el recuerdo del foco que ilumina a los contrabandistas en las noches de jaleo… Esta película te hace como volver a eso, como revivir algo que ya conocías pero que vuelve a ser nuevo.

A vueltas con el acento, un detalle que no sé si será manía mía, pero fíjense como está de cuidado el lenguaje. No es que se aspiren las sílabas finales o se cecee, es la construcción de la mayoría de las frases; un coloquialismo perfecto con esa riqueza que solo tiene el andaluz… Una sutileza haber guionizado ese lenguaje informal, que a día de hoy aún me fascina.

Técnica Superior en Integración Social, Graduada en Trabajo Social, Especialista Universitaria en Mediación, Máster Oficial en Género e Igualdad. Actualmente Doctoranda en CC. Sociales; investigadora...