Jorge Manrique se equivocó; la muerte no nos iguala a todos. A pesar de ser un denominador común a todo ser vivo, pues todo lo vivo es susceptible de morir. Pero que sea común no hace que sea igual para todos.

Basta que alguien muera para que todos hablen bien de él, para que le salgan infinitos amigos, para que muchos tengan anécdotas entrañables con el fallecido. Esto en sí no es malo, al fin y al cabo recordar a alguien no puede serlo. Pero en muchas ocasiones es inmerecido.

Por supuesto, este país nuestro, con su herencia milenaria de diferentes tribus, reyes ingratos y vecinos que te acusaban a la inquisición por un “quítame allá esas pajas”, es casi una experta en esas reacciones post mortem; tanto en las buenas como en las malas. Lo mismo se apresura en ensalzar al escritor cuyos tochos nadie soportaba o en el actor olvidado, que esta España ingrata olvida al hombre bueno y lo sepulta en el olvido.

Tristemente estamos presenciando un espectáculo de ensalzamiento inmerecido en estos días. Claro está, que cada cual tiene su público, y como dijo el torero “Hay gente pa tó”. Incluso hay gente que no se está subiendo al carro de cantar las bondades de quien fue ministro de un gobierno fascista, sino que cree cada palabra que dice a este respecto. Es único este país; ya lo he dicho, no sólo hoy, lo he dicho cuando cuestiono la que para mí fue chapucera, transición española. Somos una tierra tristemente única, el único lugar en que el ministro de un dictador fascista puede acabar siendo un padre de la Democracia, incluso fundando un partido, cosa totalmente prohibida durante sus años de mandato al servicio del Caudillo.

De todas formas, todo esto que digo es papel mojado; no sólo porque no sirva de nada, no puede servir de nada decir todo esto cuando el propio Santiago Carrillo se ríe ya de todo, y casi paternalistamente dice que bueno, que Fraga y él eran antagónicos pero que de eso hace ya mucho… Claro, a ciertas edades el tiempo adquiere una relatividad diferente, digo yo… Pero no sirve de nada porque hoy encontré la columna que a mí me habría gustado escribir, que claro está, no es ésta. La habría escrito, o más bien me habría gustado haberlo hecho, pero, no lo hice. Pese a todo, no es cuestión de privarles de lo que a mí me habría gustado que leyeran hoy, así que si no lo han hecho por lo que sea, aquí se la dejo; disfrútenla:

http://blogs.publico.es/trabajarcansa/2012/01/17/hoy-toca-hablar-bien-de-fraga/

www.SevillaActualidad.com

Técnica Superior en Integración Social, Graduada en Trabajo Social, Especialista Universitaria en Mediación, Máster Oficial en Género e Igualdad. Actualmente Doctoranda en CC. Sociales; investigadora...