Apenas abro los ojos, solo cuando escucho cosas interesantes. Verdaderamente interesantes. Prefiero mantenerlos cerrados, ajeno a todo. Aunque hace poco, a inicios de semana, lo hice. Abrí los ojos, digo. Quedan pocas cosas que me entusiasmen respecto al covid. Naufrago sobre una tabla a la deriva, chocando con chatarra, que es información, sin conocer dónde está la orilla. 

Pero, como he dicho, el lunes pasado levanté la cabeza. De refilón, escuché al presidente Pedro Sánchez que su Gobierno estaba trabajando para tratar el coronavirus como una gripe. Presté atención porque me quiso sonar bien, pero rápidamente volví a recostarme para meditar todo aquello.

CONTENIDO EXCLUSIVO

Puedes hacerte socio o registrarte gratis

Si estás registrado o eres socio inicia sesión

Cuento cosas y espero que te resulten interesantes. Escribo para seguir vivo. En Twitter: @meratleon