La región de Sevilla es una zona ideal para recorrerla en bicicleta. Y hay caminos para todos los gustos: desde la ciudad hasta pueblos y localidades aledañas que usan este medio de transporte como parte de su vida diaria.

El motivo por el que Sevilla es tan famosa entre los ciclistas se debe a su orografía plana y a un entorno totalmente preparado y adaptado para que la bicicleta se convierta en un transporte masivo. Pero, a pesar de que cada rincón de Sevilla ofrece la posibilidad de montar en bici, existen tres sitios especialmente destacados por el alto contraste que existe entre ellos.

Un recorrido por el casco urbano de Sevilla

Aunque los paisajes naturales siempre tienen un encanto especial, pedalear por la capital sevillana también esconde sus sorpresas. En Sevilla, los comercios cierran los domingos y las bicicletas ganan terreno desde el Parque de María Luisa hasta el Parque del Alamillo. Lo que embellece el camino es el río Guadalquivir, que acompaña a los ciclistas durante el recorrido.

Para los que usan la bicicleta de manera habitual o ya tienen cierta experiencia en largos caminos, seguramente les apasione un recorrido con más exigencias y sin pausa. Por contra, para las familias o para quienes busquen disfrutar de otras actividades durante el camino, aquí les sugerimos algunos lugares interesantes donde pueden detenerse a tomar un descanso y apreciar el entorno:

  • La Muralla Islámica
  • La Exposición Iberoamericana de 1929
  • La Torre del Oro
  • Jardines y monasterio de la Cartuja
  • La Basílica de la Macarena

La ciudad de Sevilla, a través de la Oficina de la Bicicleta, ofrece varias rutas turísticas para descubrir cada uno de sus rincones y lugares de interés de un modo seguro y sostenible. Para fortuna de los ciclistas, la red de carriles bici permite tanto pasear por el centro histórico como escapar de él para explorar otros espacios también interesantes.

A lo largo de la Sierra Norte

En esta zona nos encontramos con la Vía Verde, un espacio de poca dificultad especialmente transitado por bicicletas. Con casi 20 kilómetros de camino, este espectacular recorrido se enclava en el Parque Natural Sierra Norte.

Este es, de los tres recorridos, el más conectado con la naturaleza. Para aquellos que prefieran los caminos de montaña, pero sin mayores dificultades, este trayecto al pie de la sierra es un paseo excepcional. Hay que aclarar que este camino está recomendado, principalmente, para personas que ya han practicado ciclismo alguna vez por sus largas distancias.

¿Qué puedes ver en la Vía Verde?

En primer lugar, este camino está rodeado por la Rivera del Huéznar, la cual fue declarada monumento natural. A lo largo del recorrido, podrás conocer lugares tan interesantes como:

  • El Cerro del Hierro, un paisaje esculpido por la naturaleza y la minería.
  • Los pueblos de Puerto Serrano y Olvera.
  • El peñón de Zaframagón, una impresionante reserva de buitres.
  • Túneles de todos los tamaños y longitudes.

Paseo por la Vía Verde de Itálica

Sin alejarse demasiado de la ciudad, pero saliendo del entorno urbano, Sevilla ofrece paisajes agrestes que se encuentran fácilmente conectados con el área metropolitana mediante rutas ciclistas. Para llegar a estos destinos, hay que tomar la vieja senda ferroviaria.

Algunos de los senderos más populares en este entorno elegidos por los ciclistas son:

  • El río Guadalquivir
  • Las ruinas de Itálica, en Santiponce
  • Cultivos en las faldas de Camas

Si el objetivo es ir un poco más allá, la zona de Alcalá de Guadaira es otra opción que cuenta con múltiples bifurcaciones para seguir disfrutando del paisaje y del paseo en bici. Por ejemplo, la Vía Verde de Los Alcores transporta a los ciclistas hasta el municipio El Viso del Alcor, donde se aprecian el Parque de la Muela, cerros, lomas con olivos y embalses.