manzanilla-feria

Igual estos días de feria no son los más adecuados para pensar en hacer una dieta depurativa que nos ayude a limpiar el hígado de toxinas, pero os voy a ir adelantado el tipo de dieta que podríamos llevar una vez que termine todo.

Algo que debemos tener en cuenta es que no debemos confundir las pautas alimenticias puntuales que ayudan a limpiar el organismo con dietas milagrosas que prometen desintoxicar el cuerpo y no lo hacen.

Limpiar el organismo y dejar atrás los excesos que hemos cometido los días de feria es una buena opción para ayudarnos a sentirnos mejor y subir las defensas. Lo mejor es optar por frutas, verduras y alimentos integrales y descartar alimentos como el café, el té concentrado y los refrescos. Por supuesto el alcohol y las comidas grasas las debemos dejar atrás durante un tiempo.

La fruta por su gran concentración en vitaminas, minerales y su poder hidratante y antioxidante debe estar muy presente en este tipo de dieta. Las verduras compuestas de vitamina B6 son clave, ya que estimulan la recuperación de hepatocitos (células del hígado). Vegetales con ciertos sabor amargo tienen de estas vitaminas como son la alcachofa, el cardo, la achicoria, la endibia, la escarola, el nabo y el rábano. Además, la fibra, abundante en todas ellas, favorece el tránsito intestinal. Son ricas en potasio, un mineral necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal.

La alcachofa y el cardo son los alimentos por excelencia que deberíamos consumir con abundante frecuencia en estos días. Son consideradas verduras sanas, de amplio espectro medicinal, y muy recomendadas en nutrición por su alto poder coleteréticas, hepatoprotectoras y diuréticas. Sus propiedades más importantes son:

-Alcachofa: Protege el hígado y ayuda a su recuperación en caso de enfermedad hepática (hígado graso, ictericia, hepatitis, insuficiencia hepática, etc.) gracias a su principio activo, la cinarina. Ésta favorece la función biliar ayudando a la digestión de las grasas. Ayuda a tratar dolencias como indigestión, dispepsia provocada por colelitiasis (piedras en la vesícula), gases o flatulencia. Los ácidos cafeico, cafeolquínico, linoleico y oleico intervienen en su poder hepatoprotector. Destaca su efecto coléretico, es decir, de estimulación de la producción de la bilis.

-Cardo mariano: En sus semillas se encuentran muchos principios hepatoprotectores, siendo recomendado para enfermedades como la hepatitis o la cirrosis. Estimula la producción de una sustancia “glutatión” que es un desintoxicante de las células. En estudios realizados en animales se demostró que el cardo mariano, promueve el incremento del glutatión en un 35% en el estómago, el hígado, y los intestinos, además actúa fortaleciendo las membranas exteriores de las células ayudando a que las toxinas no penetren en ellas.

De padre sevillano y madre granaína, sevillana a fin de cuentas y trianera por adopción. Es técnico superior de Dietética y Nutrición. Como le gusta predicar con el ejemplo, mantiene una alimentación...