El protocolo de actuación tras la muerte de la reina Isabel II tiene todo totalmente medido. Se trata de la operación London Birdge o, en español, Puente de Londres. Lo primero que ocurrirá, acorde a este plan de actuación, será la llamada del asistente de la Reina a la primera ministra, Liz Truss, que ocupó su nuevo cargo el pasado miércoles de la mano de la propia Isabel II. En esa llamada, Truss escuchará la frase «el puente de Londres se ha caído».

Será la propia Liz Truss quien tendrá que comparecer ante los medios de comunicación para informar a la nación de la muerte de la reina Isabel II. Tras ello, el gabinete de prensa de la Casa Real británica enviará una nota de prensa a los medios de comunicación de todo el mundo, cuyo texto ya está escrito, como parte de la operación London Bridge, y que dice lo siguiente: «Estimados compañeros, es con tristeza que les escribo para informarles de la muerte de Su Majestad la Reina».

Los parlamentos de Inglaterra, Gales, Irlanda del Norte y Escocia deberán parar su actividad. Además de convocar un minuto de silencia a nivel nacional, el Palacio de Buckingham se iluminará y se colocará en su puerta un tablón de color negro. En los platós de televisión y en los estudios de radio se iluminará una luz que avisa a los periodistas de alguna catástrofe nacional, como sería la muerte de la reina Isabel II, y pondrán en marcha plan especial para los medios de comunicación que contempla el protocolo. Este plan abarca desde vestir a los presentadores de color negro hasta no emitir programas de comedia hasta después del funeral de la reina.

El cuerpo de Isabel II será transportado por militares desde el Palacio de Buckingham hasta Westminster Hall. Tras cuatro días de velatorios para familiares, la puerta de Westminster Hall se abrirá para los ciudadanos que quieran presentar sus respectos a la difunta reina.

El día del funeral se considerará festivo en todo el Reino Unido. El cuerpo de la reina será llevado a la Abadía de Westminster para dicho acto y después se trasladará al Castillo de Windsory finalmente a la Capilla de San Jorge, donde descansará junto a su marido, el príncipe Felipe.

Un año después de la muerte se coronará al príncipe Carlos, quien ejercerá las labores de rey desde el momento de la muerte de su madre. Tras ello, tocará retirar las monedas con la cara de Isabel II para ir introduciendo las nuevas con la cara del nuevo monarca. Lo mismo ocurrirá con todos los símbolos oficiales que hacen referencia a la figura de Isabel II.