Es, probablemente, la pregunta que se está haciendo todo el mundo ahora mismo. ¿Cuánto durará la erupción del volcán de La Palma? La realidad es que no hay ninguna respuesta exacta, pero sí existen indicadores que pueden dar las primeras pistas y estimaciones acerca de su duración.

Nemesio Pérez, coordinador científico del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), ha recordado que todo dependerá de la bolsa de magma de la que se alimenta la erupción. «No podemos olvidar que ese reservorio magmático somero puede retroalimentarse del reservorio magmático que está a 20 o 30 kilómetros, con lo cual esto puede durar varias semanas, si no pocos meses», ha expresado. No obstante, lo que más preocupa ahora mismo es el dióxido de azufre que emite el volcán.

El final de la erupción: entre 1 y 3 meses

El Instituto Volcanológico de Canarias ha estimado la duración de la erupción del volcán de La Palma entre 24 y 84 días. Se trata de un cálculo realizado en base a los datos históricos de otras erupciones de la isla. Sin embargo, aseguran que se trata de una pregunta «nada fácil de responder».

«Por lo tanto, sería aceptable transmitir que nos movemos en el rango de una duración entre los 24 y 84 días, con una media geométrica del orden de los 55 días de duración», indicaban este miércoles.

El Instituto apunta que la Red Sísmica Canaria ha estado registrando durante la tarde noche del martes «un fuerte incremento en la amplitud del tremor volcánico» en Cumbre Vieja, que es un indicador de la «intensidad de la actividad explosiva estromboliana en las bocas activas en este momento».

¿Cuándo llegará la lava al mar?

No se conoce a ciencia cierta cuándo llegará la lava al mar. Sin embargo, expertos y responsables públicos advierten que este hecho terminará ocurriendo, por lo que se han extremado las precauciones. Esto se debe a que, cuando la lava, que está a mil grados, entre en contacto con el agua, liberará gases tóxicos y se producirán explosiones.

Este momento será «crítico», alertaba este miércoles el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres.

De esta forma, las administraciones han pedido a la población que se abstenga de circular por las carreteras cercanas al volcán. Asimismo, se les ha pedido que no se acerquen a las coladas de lava, ya que «la situación no es ni mucho menos segura». Un ejemplo de ello es la aparición de una nueva boca de erupción la pasada noche, a 900 metros de la principal.

Según el Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), la lava discurre por dos lenguas en La Palma: una, al suroeste, tiene «un movimiento mínimo», de unos dos metros por hora. Desde el comité científico «dudan» de que se vaya a reactivar. La otra, avanza ladera abajo y ya ha entrado en Todoque.