Fernanda Rocha Kanner, una madre brasileña con más de 117.000 seguidores en instagram, se ha hecho viral por borrar las redes sociales de su hija de 14 años. La menor, una influencer que contaba con más de dos millones de seguidores, ha visto como su cuenta de instagram y Tik Tok desaparecían de la noche a la mañana.

«Voy a escribir aquí porque recibí muchos comentarios de los seguidores de Nina que querían saber qué pasó», comenzaba la madre en una publicación de Instagram. «Decidí eliminar su cuenta de Tiktok e Instagram. Aburrida, lo sé, pero nuestro papel como madre no es ser tu amiguita y eso solo lo entenderás en retrospectiva», continuaba la brasileña. Y es que el boom de las redes sociales, sobre todo con Tiktok, enfocada a adolescentes, se ha convertido en un foco de todo tipo de comentarios.

Rocha Kanner, que es médico, contó en un programa de televisión que comenzó a notar su hija le daba mucha importancia a los comentarios que le escribían a diario en las redes. «El cariño que le tenéis es de lo más bonito, pero no creo que sea saludable para un adulto y menos para un adolescente basar las referencias de autoconocimiento en la retroalimentación virtual”, contaba en su post.

Miles de comentarios

«Entre sus redes había casi dos millones de seguidores, decenas de clubes de fans, todos muy dulces pero también dañinos para cualquier adolescente en proceso de descubrimiento y búsqueda de la individualidad», continuaba la madre. «No quiero que crezca creyendo que es este personaje», sentenciaba.

Las redes sociales se han convertido en la carta de presentación de jóvenes y adolescentes. Lucir radiante, sin imperfecciones ni defectos, se ha convertido en la máxima entre los más pequeños y esta tendencia cada vez va rebajando más la edad. Esta conducta puede derivar en problemas de autoestima y validación personal, así como en trastornos alimenticios o el suicidio.

Por ello, esta madre ha sido tanto aplaudida como abucheada. «Triste generación en la que esto justifica la fama», hacía referencia Rocha Kanner, que aseguraba que «nacemos con varios dones que nos hacen únicos, pero cuando copiamos y pegamos en rebaño, se diluyen en el proceso y crecemos siendo uno más entre la multitud».

Un reflejo equivocado

Las redes muestran, en muchas ocasiones, un reflejo de la persona que no corresponde con la realidad. Además, muchos de los comentarios recibidos solo buscan hacer daño y mermar la autoestima de quien está expuesto. Este ha sido otro de los motivos que ha llevado a esta madre a borrar las redes sociales de su hija. «Las opiniones son solo reflejos de quién está ofreciendo y no quién está recibiendo. Crees que soy hermosa porque eres hermosa o eres feliz. Crees que soy feo porque eres feo o has tenido un mal día. No tengo nada que ver con eso», contaba Kanner.

«Cuando tenga contenido interesante para compartir, podrá volver a tener una cuenta», terminaba esta madre, que afirma que su hija irá a un internado suizo a terminar sus estudios junto a su hermano.

Periodista. Comunicando y aprendiendo de todo a mi alrededor. Involucrada en el periodismo social.