Alberto Garzón durante el vídeo compartido en sus redes sociales

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, se ha visto envuelto en una polémica en las últimas horas debido a sus declaraciones sobre los aspectos negativos de consumir carne. El ministro de Unidas Podemos compartió en su perfil de Twitter un mapa de Europa en el que España aparecía marcada en rojo. Este tono de rojo remarcaba que España es el país de la Unión Europea que más carne consume. A raíz de este tweet comenzó la polémica y Alberto Garzón ha compartido a través de la misma plataforma un vídeo de seis minutos en el que contextualiza su publicación anterior y se respalda en datos de otras instituciones europeas.

“¿Qué pensaríais sin os dijera que el consumo excesivo de carne perjudica a nuestra salud individual y también a nuestro planeta?”, comienza el vídeo. En estos dos conceptos se desarrolla todo el vídeo, con datos que demuestran los aspectos negativos para la salud el consumo de carne y cómo afecta al planeta. El ministro aclara que el vídeo no tiene la intención de echar la bronca a nadie. Su objetivo, según Garzón, es reflexionar antes de que el problema se convierta en crónico como ha pasado en otros países. Los datos de producción de carne han crecido mucho en los últimos años. En España, según la misma fuente, se producen 7,6 millones de toneladas.

La Agencia Española de Seguridad alimentaria y Nutrición (AESAN) recomienda un consumo de entre 200 y 500 gramos de carne a la semana. En España el consumo medio semanal es de más un kilo. El discurso de Alberto Garzón es recogido de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que lleva tiempo alertando de los riesgos del consumo excesivo de carne, y que es la responsable de enfermedades como la diabetes o los infartos, entre otras.

Otro de los argumentos en los que se apoya el discurso del Ministerio de Consumo es la contaminación que genera la producción agrícola en grandes cantidades. “Las flatulencias de las vacas y los heces de los cerdos y sus piensos generan ya más contaminación que la de los coches”, asegura el titular de dicho Ministerio. Según estudios científicos, los gases de efecto invernadero que produce el ganado representa el 14,5% de todos los gases de este tipo que se envían a la atmósfera.

Alberto Garzón fue entrevistado en el programa Hora 25 de la Cadena Ser y en él dijo que «no le están diciendo a la gente que deje de comer carne, sino que se haga de otro modo». En el mismo espacio habló sobre algunos sectores que se han mostrado en contra de estas palabras del ministro: «es normal que haya sectores empresariales en contra de cambiar los hábitos de consumo, porque se juegan sus beneficios, pero mis prioridades son la salud pública y el medio ambiente».

El ministro de Agricultura desconocía la campaña de Garzón

El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha sido tajante este jueves a la hora de desmentir que tuviera conocimiento de la campaña lanzada por Consumo para promover la reducción del consumo de carne. Planas ha asegurado que «no tenía ningún conocimiento de que se iba a hacer esta campaña» y exigió a Garzón que no le «utilice a este respecto».

Así se pronunció el ministro de Agricultura un día después de la polémica campaña de Consumo, que provocó una airada reacción de seis organizaciones interprofesionales ganaderas, que mostraron su «estupor» por el vídeo en el que Garzón intentaba desincentivar el consumo excesivo de carne.

La Junta lamenta el daño que provocan al sector ganadero «las falsas afirmaciones» de Garzón

La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha lamentado que la “imprudencia” del ministro de Consumo, Alberto Garzón, puede provocar un “grave perjuicio” al sector ganadero español, y al andaluz en particular, razón por la cual ha solicitado una “rectificación inmediata”. Las declaraciones de este miembro del Ejecutivo recomendando a los españoles que reduzcan el consumo de carne por considerar que perjudican a la salud y al planeta “no responden a la realidad, no tienen ningún rigor científico y evidencian un llamativo desconocimiento de la actividad ganadera y de la relevancia de este sector”, ha enfatizado la titular del ramo.

La producción animal andaluza generó en 2020 más de 2.000 millones de euros, que suponen el 10% de la producción de la rama agraria de Andalucía. Y la comunidad autónoma cuenta con más de 27.000 explotaciones ganaderas que generan más de 5,5 millones de jornales anuales. “Las manifiestaciones del ministro Garzón suponen un ataque a muchísimas familias que viven de la ganadería y que apuestan por una producción sostenible y de calidad reconocida”, ha recordado Crespo.

De hecho, como ha señalado, Andalucía está reclamando al Gobierno de España que incluya a la ganadería ecológica como un ecoesquema per sé dentro del Plan Estratégico Nacional de la nueva PAC, precisamente por su alto valor ambiental. “La ganadería es todo lo contrario a una actividad dañina para el planeta, es un sumidero de CO2 que no representa ni la mínima parte de la emisión de gases de efecto invernadero”, ha agregado la consejera.

“De los distintos tipos de sistemas de explotación extensivos presentes en la comunidad autónoma de Andalucía, que el ministro por su condición de andaluz debería conocer, el ecosistema de la dehesa es el más singular y característico por su alto valor natural y por su contribución al equilibrio entre el medio ambiente y la actividad ganadera. Es un sistema de explotación sostenible sin precedentes en Europa”, ha subrayado.

A esta modalidad hay que sumar la ganadería extensiva desarrollada en áreas de monte mediterráneo, así como otras zonas de pastizal natural en comarcas de sierra. En cualquier caso, con independencia del tipo de explotación que se trate, pero con gran importancia desde el punto de vista de la sostenibilidad medioambiental y económica, es necesario recordar la importancia de la práctica de la trashumancia, actividad pecuaria muy presente todavía en ciertas comarcas andaluzas, que contribuye a la diversifica- ción y conservación de hábitats de muy alto valor ambiental.