Andalucía es una de las regiones de España con mayor población con sobrepeso, un honor muy poco saludable que comparte con los gallegos que también destacan en esto de presentar kilos de más. Lo cierto es que estamos ante un enorme problema de salud que no solo lastra nuestro aspecto, sino que también nos pone en la diana de graves problemas cardiovasculares y de diabetes, entre otras patologías.

En concreto, según el Estudio Nutricional de la Población Española (ENPE), publicado en la Revista Española de Cardiología de la Sociedad Española de Cardiología, podemos hablar de un 26,7 % de andaluces con sobrepeso, aunque seguidos muy de cerca por los asturianos con un 26,2 % y los murcianos con un 25,7 %. En cambio, los que menos padecen este exceso de kilos en España son los ciudadanos de las Baleares, con un 11, 7% de afectados.

Respecto al conjunto de España, parece que el sobrepeso avanza de forma inexorable pues 53 % de los españoles presenta obesidad o sobrepeso. En suma, se perfila como un grave problema de salud que conviene atajar cuanto antes. No en vano, España se encuentra entre los países con más personas obesas del mundo. 

Población de riesgo ante la COVID-19

Para colmo, la actual pandemia de COVID-19 parece estar cebándose aún más con estos perfiles pues, según la revista científica JAMA, quienes presentan un exceso de peso tienen un 46 % más de riesgo de contagiarse de coronavirus, un 113 % más de probabilidades de necesitar hospitalización para el tratamiento de esta enfermedad e incluso un 78 % más riesgo de que sean derivados a cuidados intensivos.

Por todo ello, parece claro que nos debemos tomar muy en serio esta cuestión pues hallarnos en nuestro peso ideal resulta básico para mantener la salud y mantener alejadas las posibles patologías. Sin duda, un peso adecuado es el indicativo más evidente de que nuestro estilo de vida es saludable.

Para averiguar si este es el idóneo podemos recurrir al IMC para cuyo cálculo es preciso dividir nuestro peso entre nuestra estatura al cuadrado. De esta manera, sería IMC = KG/M2. Además, estos resultados nos pondrán sobre la pista de qué nivel de obesidad padecemos. Así, se subdivide en estos tres niveles: 

  •  Obesidad de grado 1 de bajo riesgo que es cuando la puntuación del IMC oscila entre 24 y 30 en mujeres. En los hombres, se sitúa entre 25 y 30.
  •  Obesidad grado 2 de riesgo moderado. En ambos sexos, se encontraría entre 30 y 40.
  •  Obesidad grado 3 severa. En este caso, tanto el IMC en mujeres como en hombres superaría los 40.

No obstante, conviene tener presente que los atletas o quienes sean muy deportistas pueden presentar un IMC muy alto que incluso les indique que padecen obesidad, cuando simplemente se trata de personas muy musculadas. La explicación es simple: el IMC no mide directamente la grasa corporal.