Una semana difícil en cuanto al suministro de la vacuna. Todo esto ha conllevado reproches por parte de la Unión Europea a las farmacéuticas y la duda de si estas últimas están ofreciendo todo su potencial de producción. Tanto es así que hoy se ha hecho público el contrato.
El último capítulo ha llegado con la publicación, por parte de la Comisión Europea y AstraZeneca, del contrato que recoge la entrega de 300 millones de vacunas. Sin embargo, el documento deja aún más dudas. Consta de 41 páginas, algunas de ellas tachadas, borradas, como cumplimiento de los acuerdos de confidencialidad.
El documento recoge que si la empresa no puede cumplir lo estipulado, la Comisión Europea puede presentar alternativas con una lista posibles de fabricantes en territorio comunitario para acelerar la producción.
Compromiso con la UE
Sin tachar también figura el compromiso de la UE a entregar 336 millones de euros a AstraZeneca de los cuáles dos tercios deberían entregarse en los cinco días laborales de la fecha efectiva del contrato. El documento también afirma que en caso de que las vacunas no se suministren o se entreguen tarde, la obligación de pago queda suspendida y solo se retomará cuando se complete la entrega del producto.