En el día de ayer medio centenar de personas se congregaron en la playa ibicenca de Cala Conta para celebrar una fiesta ilegal. Sin embargo, la Policía Local fue avisada de ello y acabó obligando a los asistentes a recoger la basura que ellos mismos habían dejado.

Fue sobre las 18:00 horas del domingo cuando llegaron varias denuncias al cuerpo de Policía Local de Sant Josep sobre una fiesta que estaba celebrándose en la playa, con música muy alta y alcohol de por medio, un acontecimiento de carácter ilegal en el que participaban unas 50 personas. La Policía obligó  a los asistentes a limpiar la zona, algo a lo que se procedió pacíficamente y tras lo cual la playa volvió a quedar libre de fiesta.