A la hora de hablar de festivales de verano al alza en Andalucía, uno de ellos es el que acoge la pequeña localidad gaditana de Rota, AlRumbo Festival, que ha crecido al ritmo de la espuma, llegando a desbordar la organización como denuncian jóvenes y asociaciones de consumidores.
El festival gaditano ha embelesado a sevillanos, roteños y andaluces en general que se desplazaron en masa del 17 al 19 de julio para disfrutar de un gran cartel y un paisaje de ensueño.
Pero la quinta edición de este evento podría haber ‘muerto del éxito’: un aforo demasiado concurrido ha provocado el caos, según denuncian algunos de los asistentes al festival, y ha sacado los colores a su organización.
Rota cuenta con 30.000 habitantes y durante esta cita llegó a triplicar su población. Sin el sitio requerido para los vehículos, el Ayuntamiento gaditano habilitó una zona de aparcamientos en el entorno del festival que «no fue suficiente», denuncian José Manuel Vázquez y Juan Manuel Rodríguez, jóvenes de 21 años, estudiantes y asistentes a ‘Al Rumbo’, que aseguran a Sevilla Actualidad que «nos daba miedo mover el coche porque quedarse a comer allí era caro y casi imposible». Además, afirman los jóvenes, «los descampados se convirtieron en aparcamientos ‘clandestinos’ en los que no te dejaban sacar el coche porque perdías el hueco después de haber pagado ocho o diez euros».
Muchas críticas ha despertado el aumento de público de este AlRumbo 2014. Los asistentes han denunciado en redes sociales y a través de una video-denuncia que la organización «vendió más entradas de las que el aforo podía asumir». Además, la promesa de pernoctar en el camping sólo se cumplió para los más afortunados, o los más avispados, que consiguieron apoderarse de un codiciado hueco. «AlRumbo dijo que el aforo era limitado, pero la escasa presencia de seguridad en la zona provocaba incluso que un mismo grupo reservara varias parcelas a otros asistentes no presentes en el camping. La seguridad ha sido muy deficiente y había masificaciones de personas en todos lados», asegura José Manuel.
Facua Cádiz recibe numerosas quejas
Estas declaraciones las ha respaldado Facua Cádiz. La asociación de consumidores ha comunicado este martes que ha recibido un importante número de quejas de usuarios con respecto al desarrollo del Festival Alrumbo. «Los usuarios denunciaron la imposibilidad de acampar en las zonas habilitadas para ello», apuntan desde la entidad.
«Facua Cádiz insiste en que, aunque en las condiciones de venta de las entradas se señalaba que su adquisición daba derecho a acampar pero que no quedaba garantizado, los organizadores deberían haber informado del número de plazas acorde a las entradas puestas a la venta».
Uno de los temas más denunciados ha sido el check-in. Otra de las asistentes, Alba Navas, asegura que «para entrar en las horas claves se formaban tapones y casi avalanchas. El check-in es un verdadero descontrol, incluso he llegado a ver gente saltando los muros del recinto y los de seguridad mirando a otro lado». Por su parte, la organización ha insistido, en su balance del festival a medios gaditanos, en que “el aforo ha sido sometido a estrictos controles».
«Existe un plan de autoprotección del recinto que delimita la capacidad de público por metro cuadrado. Éste no solo se ha respetado, sino que la venta de entradas ha sido varios millares menor a la permitida por el mismo para garantizar la seguridad de los asistentes. Las infraestructuras han sido aprobadas por una minuciosa inspección realizada por el Ayuntamiento de Rota, en la que los técnicos municipales quedaron muy satisfechos con nuestro trabajo”, asegura Etnirocker al medio Bahía de Cádiz.
Sin embargo, Facua Cádiz ha comunicado que «los afectados se han dirigido a la asociación para comunicar los riesgos de seguridad que se vivieron con problemas de acceso al recinto en el que se desarrolló el evento».
Video: Shady Moreno
Esto se debió al retraso de una hora de la apertura de las taquillas y a que las vallas reguladoras de la larga cola para acceder al recinto fueron escasas. «Los asistentes se agolparon hasta que el ‘sálvese quien pueda’ imperó», aseguran los asistentes consultados.
«Para mí una solución sería abrir las taquillas días antes para que la mayor parte de la gente que va al camping del festival acceda paulatinamente y no tenga que armarse la que se arma haciendo cola dos días antes de que empiece el festival y provocando las imágenes que todos hemos visto, yo en persona», comenta Alba.
Desfallecimientos por altas temperaturas
Las altas temperaturas provocaron, por lo demás, insolaciones y desfallecimientos. Sobre este aspecto, la organización ha hecho saber que es consciente de que el calor “provocó que parte del público sufriera en cola e influyó mucho en un aspecto que mejorará la próxima edición”. En este sentido, ya ha pedido disculpas por las molestias ocasionadas “durante esta fase del festival”.
“Hubo una falta de previsión para afrontar la demanda de las primeras horas y un error de coordinación que nos impidió ser resolutivos con la rapidez necesaria. Uno de los principales aspectos en los que se trabajará desde el principio será para conseguir que no se repitan colas agotadoras que pongan en riesgo a los asistentes”, ha declarado Etnirocker al medio ‘Bahía de Cádiz’. “Debimos ser más estrictos en nuestra planificación pero era un dispositivo programado para que comenzara su funcionamiento durante la mañana del jueves”.