A finales de octubre, el Tribunal Constitucional (TC) declaraba inconstitucionales y nulos una serie de artículos presentes en la ley de Haciendas Locales (aquellos sobre el impuesto de plusvalía), en los cuáles había que pagar siempre dicho impuesto con independencia de si se había producido o no un verdadero incremento de valor; los órganos políticos se han puesto a trabajar para aportar a la situación una solución lo más pronta posible.
La última novedad sobre el impuesto de plusvalía ha sido que el real-decreto-ley promulgado por el Ministerio de Hacienda ha aprobado este lunes ofrecer al contribuyente dos opciones para que éste elija la que le resulte más conveniente. A esto, se suma que los ayuntamientos podrán ajustar a la baja en hasta un 15% el valor catastral del suelo.
Según fuentes del Ministerio, el nuevo método será más objetivo, puesto que se basará en la aplicación de unos coeficientes actualizados de forma anual en función de la evolución de los valores inmobiliarios. Así, el contribuyente podrá elegir por un lado, optar por calcular el importe aplicando los nuevos y renovados coeficientes sobre el valor catastral (todo ello dependiendo el número de años transcurridos desde la operación) o, por otro lado, estimar el valor haciendo la diferencia entre el precio de compra y el de venta.