Enfermera / JA

Más de ocho mil personas en el norte de Alemania han sido vacunadas con una solución salina, en lugar de la vacuna contra el COVID-19, por una enfermera negacionista. En una investigación policial se ha descubierto que esta enfermera, que pertenece a Cruz Roja, les inyectó una ‘vacuna falsa’.

A pesar de que el líquido inoculado no produce ningún efecto, las personas que fueron «vacunadas» pertenecían a grupos de riesgo, por lo que esta acción podría poner en riesgo su vida. Los mayores fueron vacunados en los meses de marzo y abril, pasando cuatro meses sin vacuna en los que podrían haber incluso fallecido.

Los motivos que llevaron a esta enfermera alemana a inocular una vacuna falsa no están claros. Sin embargo, según investigadores de la policía, la mujer compartía en sus redes opiniones de escepticismo frente a la vacuna.

La sospechosa está siendo investigada actualmente por una unidad especial, según han adelantado medios alemanes.

La enfermera niega los hechos

La sanitaria, ahora, niega los hechos y se opone a las acusaciones que se han vertido sobre ella. A través de su abogado ha comunicado que se trató de un hecho puntual.

«Es incorrecto que debido al comportamiento de nuestra cliente se suministraran en algún momento dosis de la vacuna que sólo consistieran en cloruro de sodio», ha asegurado el abogado Christoph Klatt.

Lo que sí ha puntualizado Klatt es que la enfermera negacionista rompió sin querer un frasco de vacunas que trató de compensar con la solución. Asegura, además, que su cliente «no actuó por motivación política ni administró sólo solución salina a las personas que se querían vacunar».