La policía australiana investiga a un ciudadano español que ha provocado el confinamiento más estricto que ha vivido el país desde el inicio de la crisis del Covid. Todo comenzó con una mentira.

Los rastreadores trataban de localizar el inicio del brote en la ciudad de Adelaida del que formaba parte un español empleado del hotel donde se detectó el brote por primera vez. Fue al preguntarle por el origen del contagio, cuando este hombre, de 36 años, ocultó que trabajaba además en una pizzería de la ciudad, inventando una versión falsa de sus pasos recientes según la cual se habría contagiado al comprar una pizza en esa pizzería.

La mentira acabó desembocando en un aumento del nivel de alarma de la situación, lo que llevó al decreto de un confinamiento estricto de hasta seis días, el más estricto hasta la fecha en Australia y con prohibición de salir a hacer ejercicio o pasear a las mascotas, que se ha anulado este viernes al destaparse el engaño.

Por el momento, y según ha informado The Australian, las autoridades investigan el caso para determinar los delitos en los que pueda haber incurrido el ciudadano español con esta mentira.