A partir de este martes quienes compren un nuevo coche podrán beneficiarse de una subvención pública que puede llegar hasta los 5.500 euros, según el plan de apoyo a la automoción anunciado ayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

En total, se destinarán 550 millones de euros a este paquete de medidas, con el objetivo de «acelerar la reducción de emisiones y facilitar la sustitución de vehículos antiguos». Estas ayudas públicas deberán ser complementadas por fabricantes y concesionarios con una cuantía similar, salvo en la compra de un coche eléctrico puro.

Para ello hay cuatro paquetes de medidas, que se ajustan a las distintas necesidades de los usuarios. Para incentivos a la compra se han previsto 450 millones de entrada. De ellos, 250 corresponden al plan de renovación del parque automovilístico, y se concederán tanto para vehículos eléctricos como para los tradicionales de gasolina y diésel siempre que se lleve al desguace uno de al menos 10 años de antigüedad. Por otro lado, otros 100 millones corresponden a la renovación de flotas por parte de instituciones públicas, mientras que los 100 restantes, corresponden a la adquisición de coches eléctricos.

La ayuda oscila entre los 400 y 4.000 euros, dependiendo de la eficiencia del vehículo adquirido. Sin embargo, si compras un coche eléctrico, la ayuda podría llegar a los 5.500 euros. Por su parte, para las pymes se han previsto ayudas de entre 350 y 3.200 euros. En los turismos, el precio del vehículo no podrá superar los 35.000 euros y deberá contar con etiqueta de eficiencia energética A o B y emisiones inferiores a 120 gramos de CO2 por kilómetro.

– Coches eléctricos: en el caso de los coches con etiqueta CERO se percibirá una ayuda de 4.000 euros que incrementará en 1.000 más la empresa fabricante del vehículo.

– Coches híbridos: en el caso de los híbridos, con etiqueta ECO, la ayuda prevista es de 1.000 euros para aquellos con etiqueta energética A, 600 euros en caso de que la etiqueta energética sea B. El fabricante incrementará la ayuda con la misma cuantía: 1.000 o 600 euros dependiendo de la etiqueta energética del vehículo.

– Diésel o gasolina: los coches gasolina y diésel con menos de 120 gramos de CO2, y etiqueta tendrán una ayuda de 800 euros en caso de que su etiqueta energética sea A; de 400 si la etiqueta energética es B. El fabricante incrementará la ayuda con la misma cuantía: 800 o 400 euros dependiendo de la etiqueta energética del vehículo.