Una conductora ha sido protagonista involuntaria de este lunes en las redes sociales tras introducir su coche en una boca de metro de la Plaza de España en Barcelona. Las imágenes se han hecho virales. Según ha declarado más tarde, creía que era un aparcamiento subterráneo.
El incidente no ha causado víctimas de ningún tipo, aunque los bomberos han tenido que acudir ha rescatar el coche, haciendo falta montar un operativo con varios vehículos. Ocurría sobre las 10:30 de la mañana, cuando la conductora buscaba un lugar para estacionar.
El coche quedó atascado en la primera parte de la bajada, tras el intento frustrado de su dueña por descender con él las escaleras del Metro pensando que se trataba de un acceso a parking.
La situación generó en la Plaza gran expectación, haciéndose eco las redes del desaguisado, como es habitual. Los comentarios jocosos no se han hecho esperar. Desde quienes defienden la necesidad de aportar a la conducción motorizada la misma movilidad que disfrutan las bicicletas hasta quienes comparan el suceso a lo que ocurre cuando vuelves de vacaciones y se te atasca la rutina.
La policía local de Barcelona, por su parte, ha abierto una investigación al respecto.