Podría decirse que en mi casa, además de una modesta pero variada biblioteca, tenemos una breve pero personal hemeroteca. La mayoría de periódicos se guardan porque contienen noticias de algún familiar o amigo, o algún hecho relevante a nivel personal, o sentimental. Puede que la joya de la brevísima colección sea un desgastado ABC del 24 de Febrero de 1981.
Era de mi abuelo materno, quien según su costumbre, firmó el ejemplar en la portada, como hacía todos los días, no sé exactamente porqué, ya que no leía el periódico en ningún lugar donde pudieran sustraérselo o algo parecido.
La portada de aquel martes, obviamente, está dedicada al golpe, con una foto histórica de Tejero arma en mano. Según se explica en la noticia, la foto ilustra el hecho gracias a que reportero guardó el cliché en su zapato. La historia ya la saben, el final feliz también.
En lo que concierne a lo local, se reproduce la nota que el Gobierno Civil hizo pública, restableciendo la normalidad. No se menciona porqué Sevilla, la Segunda Región Militar no respaldó el golpe como por ejemplo si lo hizo Valencia. Imagino que por muy demócratas que fuéramos, no quedaba del todo bien contar que Parias Merry andaba entretenido con… otras cosas, como para sacar tanques a la calle.
Como el lunes no había periódico, salvo La Hoja del Lunes, el ejemplar está lleno de resúmenes de fútbol del fin de semana pasado, en que se había jugado un Betis- Barça apasionante que gozó de lleno hasta la bandera y empate a uno, mientras que el Sevilla se había enfrentado contra el Murcia en la Condomina, resultando este con empate a cero.
En las carteleras sevillanas podía verse “Muerte de un corrupto” “La frígida y la viciosa”, para mayores de 18, “Aterriza como puedas” o “Con la muerte en los talones” entre otros grandes y en ocasiones morbosos títulos, estos últimos clasificados con una S.
Se anuncia el comienzo del Carnaval de la Alameda la semana siguiente, anuncios peculiares incitando a los ciudadanos a llevar a los niños al parque de María Luisa, sin más interés comercial que fomentar la salud y su orgullo de sevillanos. Resultados de detenciones, robos, entradas y salidas de barcos en el puerto…
El crucigrama está completamente hecho; curiosamente, una de las palabras era un nombre femenino, que resulta ser el de mi abuela, la esposa del dueño del periódico. Algunas páginas están algo manchadas. Puede que en el desayuno mi abuelo se apresurara a leer teniendo poco cuidado de la combinación que el café y el papel pueden tener. Pero aquel militar ya retirado, que nunca fue fanático pero que la tarde anterior si pensó que era probable que se había terminado aquello de la democracia, finalmente, con la calma que España recuperaba, se entretuvo en resolver todo el crucigrama.
Sé que hoy día las hemerotecas digitales nos dejan a golpe de clic cualquier noticia del pasado, pero a mí me gusta tener ese periódico viejo que en su deterioro deja ver el paso del tiempo, y que en un claro de la portada atestigua que Rafael estuvo ahí, comprando como cada día el periódico, que por lo señalado mi madre guardó, ignorando que en un futuro, a mí me gustaría más conservar ese ejemplar algo ajado, que tener todo a golpe de ratón.