Un profesor, de 48 años de edad y que ejercía su labor en un centro de enseñanza de Dos Hermanas, ha sido condenado por la Audiencia de Sevilla a cuatro años de cárcel y al pago de una multa de 1.320 euros por realizar tocamientos a tres menores de edad durante sus clases. Si bien, el tribunal ha suspendido la pena de cárcel por lo que el acusado no pisará la prisión. A cambio deberá no volver a delinquir, pagar las indemnizaciones de 1.500 euros a cada víctima y realizar diez meses de trabajo en beneficio de la comunidad.

Los hechos tuvieron lugar durante los cursos académicos 2012/2013 y 2015/2016, periodo en el que el acusado impartió clases en un centro de enseñanza de la localidad nazarena, según informa el diario ABC de Sevilla.

Concretamente, en los meses de la primavera de 2013, este profesor realizó tocamientos repetidamente, durante tres semanas en el contexto de unas clases extraescolares, a un menor de edad. También hizo el intento de besarle en la boca, pero el menor supo esquivar el gesto.

En el primer mes de 2016 comenzaron los tocamientos hacia el segundo menor. La víctima sufrió violaciones a su intimidad durante el transcurso de una clase.

Durante el mes de febrero del mismo curso académico, el profesor fijó en un tercer menor sus actos. Cuando el alumno preguntaba alguna duda al profesor, éste se acercaba a su mesa y realizaba los tocamientos.

El juicio se celebró el pasado mes de septiembre y en el mismo el profesor, en virtud al acuerdo de conformidad alcanzado entre su defensa y la Fiscalía, reconoció todos los hechos por los que ha sido condenado, menos los que hacían referencia a otro posible abuso de un cuarto menor, por lo que ha sido absuelto.

No podrá ejercer como profesor

El tribunal ha declarado una multa de un pago de cuatro euros al día durante once meses por los daños ocasionados al primer menor y dos años de cárcel por cada uno de los restantes.

Además, el profesor debe asumir la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a las tres víctimas por un tiempo superior a los cuatro años. Tampoco podrá ejercer como profesor u otra ocupación que conlleve relación directa con menores durante tres años. Tendrá que indemnizar a cada menor con 1.500 euros.

No obstante, a pesar de esta pena, los tres magistrados que conformaban el tribunal han acordado la suspensión de la pena de cárcel durante un plazo de 3 años, condicionada a que no vuelva a cometer delito alguno, al pago de las responsabilidades civiles y a realizar diez meses de trabajos en beneficio de la comunidad.