Dejen de pellizcarse porque no estamos soñando. España es Campeona del Mundo. Después de setenta años de Mundial y con mucho sufrimiento a nuestras espaldas, “La Roja”, en manos del mejor portero del mundo, Iker Casillas, ha levantado el tan ansiado trofeo. Un sentimiento indescriptible el de una afición, un país, que desde los más jóvenes a los más mayores, se ha echado a la calle para celebrar la victoria.
Ara Reina. El fútbol nos lo debía. Habían sido ya muchos los sufrimientos que habíamos padecido con eliminaciones injustas. La sombra de Al Gandur revoloteó por la cabeza de Webb, el colegiado inglés que ha perdonado más de una a los holandeses, que deberían haberse quedado con nueve en la primera parte.
Nuestros chicos, los campeones, son una generación de estrellas que nacieron para liderar el fútbol mundial, llamados a alcanzar la gloria futbolística. Atrás quedan oscuros momentos que nos llevaron a la frustración. La nariz de Luis Enrique ha sido vengada, el centro de Joaquín no ha salido fuera y el gol de Morientes ha subido al marcador en las botas de un pequeño pero gran Iniesta que será para siempre héroe nacional.
Tantos años esperando este momento y ahora que ha llegado no encontramos palabras para describirlo. El gol de Iniesta está marcado en nuestra retina para siempre y el 11 de julio de 2010 ha quedado grabado en nuestra memoria y jamás será olvidado.
Y seguimos haciendo historia y rompiendo estadísticas. Nunca antes un selección que había comenzado el Mundial perdiendo su primer partido, había ganado el Campeonato del Mundo. Pero señores, «Spain is different» y la mejor. Mañana vuelven los titanes para celebrar con la afición el título. Nosotros los esperamos con los brazos abiertos.
Casillas, Piqué, Puyol, Capdevila, Ramos, Iniesta, Xabi, Xavi, Busquets, Pedro, Villa, Reina, Silva, Llorente, Navas, Marchena, Valdés, Torres, Fábregas, Mata, Albiol, Arbeloa, Javi Martínez, Vicente del Bosque, muchas gracias por hacer que nuestros sueños se hicieran realidad. ¡Muchas gracias campeones!