Al tiempo que ‘Monchi’ y compañía visitaban las Hermandades de La Sed y San Bernardo, la plantilla sevillista se ejercitaba ayer de manera intensiva en la Ciudad Deportiva. A su vez, durante la sesión de mañana, Ramón Orellana atendió a los medios en la sala de prensa.
Pedro J. Rojí. Este Miércoles Santo, Antonio Álvarez preparó para sus hombres doble sesión de trabajo, matutina y vespertina, a puerta cerrada. Abundó el trabajo físico, con circuitos y cambios de ritmo, así como trabajo con balón, dividiendo Álvarez el grupo en dos para esta faceta: por un lado los defensores y por otro los centrocampistas y delanteros.
En cuanto a los lesionados, las buenas noticias siguen acudiendo a Nervión: Lautaro Acosta confirmó las sensaciones positivas del martes y trabajó con total normalidad, mientras que Squillaci hizo carrera continua. El resto de los lesionados continuó con su trabajo habitual de recuperación.
A su vez, el preparador físico del club Ramón Orellana atendió ayer al mediodía a los medios de comunicación tras el entrenamiento de la mañana para aclarar lo que ya explicara anteayer Del Nido, el consabido tema del actual momento físico de la plantilla. Orellana confesó que ésta es «la temporada más compleja que he tenido nunca, con todos los condicionantes que ha habido y aún con eso estoy contento, porque estamos bien situados».
Orellana explicó que los problemas que este año han provocado el mal momento físico del equipo, forman un círculo vicioso. Según el preparador, las muchas lesiones que ha habido y el tremendo ritmo de encuentros han provocado que no se haya podido dar el descanso necesario a algunos jugadores, que han terminado por cargarse de mucho trabajo: «Hemos estado jugando unos meses muy sobrecargados, con muy pocos jugadores y si vemos el reparto de minutos, hay hombres que no han tenido rotación ninguna. El calendario que hemos tenido, lleno de partidos, cuando se tiene una plantilla al completo, se puede acometer rotando y así se mantiene el nivel de competición”.
Ramón Orellana justificó el bajo rendimiento de algunos jugadores, sin dar nombres, que se han encontrado por debajo de su nivel habitual: «Aquí hay un círculo en el vamos jugando con las cargas y actualmente tenemos jugadores con muchos minutos de competición y con una gran fatiga psíquica y jugadores que han salido de lesiones y prácticamente después de salir de los recuperadores han tenido que jugar sin tener la potencia o la resistencia adecuada». Y explicó que, ante estas circunstancias, “hemos tenido la necesidad de variar cosas, esclavos de las circunstancias y de la competición. Y estamos muy satisfechos con nuestro trabajo».
El preparado físico del Sevilla se mostró optimista y tranquilo y recordó que «Hace dos temporadas me hicieron una entrevista preguntando lo mismo, porque el equipo no estaba bien, y de los últimos siete partidos ganamos seis. Este año pasó exactamente igual. Lo que quiero decir es que nosotros somos gestores de recursos humanos, hay que jugar a ciertos riesgos y tenemos que hacer una visión global de la temporada”. Orellana concluyó su comparecencia aludiendo a la posición actual del equipo, de la cual se siente orgulloso: “Todos los equipos tienen momentos en los que lo pasan mal, pero lo importante es estar bien situado en el tramo final, y nosotros estamos bien situados».
Refuerzo del Metro para el partido del sábado
Según ha informado la Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, Metro de Sevilla intensificará la flota de trenes a partir de las 20.15, sobre todo en las estaciones de Nervión y Gran Plaza, de cara al encuentro del próximo sábado entre el Sevilla FC y el CD Tenerife en el Sánchez Pizjuán. En este sentido, se reforzará en dichas estaciones, tanto el personal como la seguridad de éstas.
El llamado Plan Especial de Actuación se aplicará, además, aumentando la frecuencia de los trenes en las horas clave: antes del partido (desde la puesta en marcha del dispositivo hasta las 22.00) y después de éste (entre las 23.40 y las 00.15 horas). Para ello, el aumento de la flota de trenes será de siete unidades con el fin de mantener siempre 12 trenes operativos y reducir así el intervalo de paso de uno a otro hasta los 4 ó 6 minutos.