Los tres puntos se quedan en casa, los de Jiménez se afianzan en el tercer puesto de la tabla y sigue demostrando que ellos también tienen mucho que decir en esta competición también.
Guía Blasco. Dos realidades muy distintas se enfrentaban esta noche en el Sánchez Pijuán, un Sevilla que buscaba demostrar que el seguía formando parte de los puestos altos de la tabla y un Villareal que buscaba afianzarse en los puestos medios de la tabla.
El partido ha comenzado con una primera parte muy reñida, en la que los dos equipos no han tardado mucho en sorprender a los guardametas. El primer gol hacia rugir a los nervionenses, Luis Fabiano enganchaba el balón en el minuto 8. Pero la cosa no quedó así, ambos equipos se sentían cómodos en el campo y 20 minutos después Pires estrenaba la portería de Palop.
La segunda parte continúo siendo un espectáculo de buen juego por parte de ambos conjuntos, los dos merecían ser los campeones de sus expectativas pero como en toda batalla tan sólo uno puede ganar y así fue. Un recital de goles se han paseado por el Sánchez Pijuán en tan solo 45 minutos, primero Fuster (m59) asustaba a la afición rojiblanca, luego Luis Fabiano le respondia (2-2 m61) y por último, Kanouté, con hambre de gol tras su lesión sentenciaba el partido (3-2).
El Sevilla FC tiene que centrarse ahora en la Copa del Rey y en la Champions, el próximo fin de semana no habrá Liga pero los de Jiménez seguirán preparándose para seguir demostrando en cada una de las competiciones que el Sevilla FC dará mucho que hablar y también está ahí para luchar.