gol madrid

El Sevilla cayó claramente ante un brillante Real Madrid que desarmó todas sus virtudes en un partido donde los nervionenses echaron en falta una mejor dirección desde el banquillo.

Emery no se escondió en la rueda de prensa previa al partido y el Sevilla saltó al césped de Cardiff tal como indicó su entrenador esperando a su rival cerrando todos los espacios por donde su rival podía entrar, un Real Madrid que este verano ha dado el paso definitivo para convertirse en el equipo total, capaz de atacar en estático como nadie y de aprovechar las fases de despliegue ofensivo de su adversario para salir a una velocidad endiablada en apenas tres toques.

El Sevilla, pese a la infinita calidad del enemigo que tenía enfrente, sabía como jugarle cerrando todos los pasillos posibles, por el centro y por fuera con Denis Suárez, Krychowiak y Carriço multiplicados  en las ayudas y un Fazio excelente en la anticipación. Pero el Real Madrid siempre se puede acoger a sus individualidades, a un Cristiano Ronaldo que en cada intervención sabía como sembrar el pánico en la defensa sevillista, a Modric y a Kroos, que con inteligencia y paciencia sabían cómo orientar el juego, y por supuesto a Bale y a James Rodríguez, que sin ser brillantes desequilibraron en los momentos clave.

El propio colombiano avisó de lo que el Real Madrid era capaz en el 16’ mandando un centro brillante a la llegada en el segundo palo de Bale, que se encontró con Beto anticipando por donde llegaría la ventaja del Real Madrid. Porque al Sevilla le faltó la maldad necesaria para hacer daño al Real Madrid. El recién llegado Denis Suárez fue el alma del equipo pero no encontró la ayuda en sus compañeros. Bacca, incomprensible como aguantó tanto tiempo en el campo, no tenía el físico para transformar en peligro las salidas de su equipo y Aleix Vidal demostró que está años luz de sus compañeros. Sólo Vitolo le acompañaba desequlibrando por la banda izquierda y pudo adelantar a los suyos en el 19’ con un disparo escorado que Casillas supo despejar.

Sobre todo por el carril central, con un Denis Suárez omnipresente y con los pasillos que lógicamente dejaban Modric y Kroos. Pero al Real Madrid le daba exactamente igual como llegar el gol e hizo valer su gran virtud de años anteriores. Y en un brillante contragolpe, Bale centró desde la izquierda para la llegada al segundo palo de Cristiano Ronaldo, que sin oposición encontró la red.

Desde este primer tanto, el Real Madrid jugó a placer y no existió resquicio alguno para la machada salvo algunas jugadas aisladas que Casillas acabó solucionando. El Sevilla agradeció el final de la primera parte, porque casi todos los jugadores merengues, excepto Benzema en idéntico nivel físico a Bacca, merecían el gol.

Pero desgraciadamente, la segunda parte fue una continuación de la primera y el segundo tardó tres minutos en llegar en un disparo de los que gustan a Cristiano Ronaldo que dobló las manos a Beto. Era el momento adecuado para sacar la grandeza que tanto ha demostrado en las finales, pero es que tampoco se encontró nunca con un rival tan completo como el Real Madrid, que dominaba todas las facetas del juego. Se sospecharon ciertas lagunas en la zaga, pero tampoco el Sevilla fue capaz de exigirle.

El partido se convirtió en un Denis Suárez contra el Real Madrid, cuando sus compañeros, después de largos periodos corriendo detrás del balón, acababan robando el balón. Para colmo, los fantasmas de Emery volvieron a repetirse, pues tardó demasiado en ver los defectos de su equipo. Se echó de menos a Reyes (no salió hasta el minuto 77) y Aleix Vidal permaneció demasiado tiempo en el campo.

Se repitieron los errores pasados desde el banquilo, pero aún así el principal culpable de la derrota sevillista no es otro que el Real Madrid, un equipo completísimo, que sin llegar en plenitud física fue capaz de plasmar sobre el campo una superioridad indiscutible. Tuvo su arreón final el Sevilla para morir con dignidad, gracias, entre otras cosas, a la salida de un Reyes que tiene mucho que aportar en este equipo.

El Sevilla cerró la Supercopa de Europa con un balance amargo, con la sensación de que pese a la superioridad del rival, se pudo hacer algo más. Se perdió el primer título de la temporada pero esto sólo es el comienzo de una nueva historia que Emery debe volver a inventar desde un bonito punto de partida.

Ficha técnica

Real Madrid C.F.: Casillas, Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Fabio Coentrao (Marcelo 83’), Modric (Illarramendi 86’), Kroos, Bale, James Rodríguez (Isco 71’), Cristiano Ronaldo y Benzema

Sevilla F.C.: Beto, Coke (Diogo Figueiras 83’), Fazio, Pareja, Fernando Navarro, Krychowiak, Carriço, Vitolo, Denis Suárez (Reyes 77’), Aleix Vidal (Iago Aspas 65’) y Bacca.

Árbitro: Mark Clattenburg, inglés. Amonestó a los madridistas Carvajal y Kroos y al sevillista Vitolo.

Goles: 1-0 (29’) Cristiano Ronaldo; 2-0 (48’) Cristiano Ronaldo