El Sevilla visita el Alfonso Pérez para medirse a un Getafe con el agua al cuello. La necesidad de puntos del equipo madrileño unida a la cercanía de la final de Turín complica la visita.
El buen hacer del Sevilla en Liga permite afrontar a los jugadores y sobre todo a la afición un final de competición sin sobresaltos, con la presencia en la próxima Europa League asegurada desde hace un par de jornadas.
Los de Emery van certificando partido a partido una alta posición en la tabla y en Getafe llega la posibilidad de asegurar la quinta plaza dependiendo siempre del resultado que coseche la Real Sociedad situada a dos puntos de los nervionenses. La tranquilidad en la tabla se une ahora a la próxima final europea ante el Benfica que inevitablemente planea en la mente de todo sevillista, por lo que el partido ante el Getafe queda en un segundo plano ante la opción de alzarse nuevamente con el título europeo.
Para el equipo madrileño este partido supone una auténtica final, inmerso en puestos de descenso desde hace algunas jornadas, el conjunto que ahora dirige Cosmin Contra buscará tres puntos clave para la salvación. La parte baja se encuentra ahora más apretada que nunca con hasta seis equipos implicados para los dos puestos que quedan por decidirse, por lo que una victoria ahora mismo supone un impulso casi definitivo hacia la obtención de la permanencia en la máxima categoría.
El equipo madrileño parece haber superado ya la malísima racha que llevó a los getafenses a no ganar en quince jornadas consecutivas, y la victoria ante el Málaga y sobre todo el empate en el Camp Nou en la última jornada ha espoleado a un equipo que parecía condenado al descenso y que ahora ve la salvación más cercana que nunca.
En cuanto a la alineación sería impensable que la final ante el Benfica no influyera en el once de los sevillistas en el Alfonso Pérez, la inclusión en la convocatoria de varios canteranos sumado a la fuerte carga de partidos en las últimas semanas deja entrever que el técnico vasco hará numerosas rotaciones respecto al equipo habitual, sabiendo además que los jugadores menos habituales han ayudado y mucho en el exitoso desarrollo de la temporada que ya termina.