Tras dos victorias consecutivas y una imagen consistente y fiable en Liga, el equipo de Unai Emery quiere asaltar el Nuevo Los Cármenes y colocarse definitivamente en el pelotón de arriba.
El Sevilla regresa a la Liga después del formidable derbi del anterior fin de semana. En aquel encuentro exhibió todas las virtudes que un equipo tiene que tener para estar arriba: intensidad, firmeza, tensión, ayudas, calidad y pegada, mucha pegada. Sobra decir que sin duda ése es el camino a seguir, pese a que no siempre en lo que va de campaña los de Unai Emery hayan sido capaces de tomar la dirección adecuada. Sin ir más lejos, el pasado jueves después de una gran primera parte se dejaron invadir y a la postre empatar por un Estoril que en el descanso parecía que no tenía nada que hacer. Es el precio de la relajación, que tan cara sale en el fútbol actual, donde la igualdad es máxima y por lo general deciden pequeños detalles.
Bien haría el Sevilla en tener muy presentes sus dos últimos encuentros a la hora de plantarse este domingo en el césped del Nuevo Los Cármenes, donde a hispalenses pintiparada para dar un salto definitivo en la tabla y colocarse en el pelotón europeo, dejando definitivamente atrás un inicio repleto de turbaciones. Parece innegable que el equipo ha encontrado ya una fórmula en la que se acerca mucho a una versión equilibrada y fiable.
Se vio en Cornellá y se ratificó ante el Betis. Por eso, pese a las bajas, lo más normal es que Emery renueve esta apuesta, porque es la que más solidez ha reportado hasta ahora y sin duda resulta apropiada para afrontar a un Granada que en su casa araña y es verdaderamente correoso, pese a que los números no le terminan de acompañar, pues de siete encuentros como local ha ganado dos y ha perdido cinco, si bien sólo en uno de ellos cayó por más de un gol de diferencia y equipos como Madrid, Valencia o Atlético de Madrid lo pasaron muy mal para puntuar.
No le van a regalar nada al Sevilla en el Nuevo Los Cármenes ni falta que le hace a los de Unai, que si mantienen la línea que comenzaron a trazar en Cornellá tendrán mucho ganado. El Araby es un buen delantero, pero Carlos Bacca y su racha deben pesar más, y así en todas las líneas. O lo que es lo mismo, el Sevilla apriori es superior, como también lo era ante el Estoril, pero tendrá que demostrarlo en el campo.